El orégano poleo también conocido como orégano francés, tomillo español, menta mexicana, entre otros nombres, es una planta que mayormente se utiliza para condimentar algunos alimentos, pero en realidad es una de las esencias que posee una gran cantidad de propiedades que pueden ser bien aprovechadas por los humanos.

Según estudios realizados, el orégano es una de la plantas antioxidantes más potentes que existe. Además tiene un efecto mucho más potente que las manzanas, las naranjas y los arándanos, algunas de las frutas con mayor capacidad antioxidante.

En la medicina tradicional se le atribuye propiedades curativas para los ataques de epilepsia, desinfectante, antimicótico y estimulante muscular.

Su tallo y sus hojas, bastante abundantes, están cubiertos de pequeños y finos pelos, de los que se puede extraer un aceite esencial.

Sus hojas desprenden un olor muy particular, y suelen dejarse secar para luego elaborar aceites, infusiones y para sazonar preparaciones.

El orégano destaca por su contenido de Omega 3, hierro, magnesio, cobre y calcio, así como por aportar vitaminas B6, C, E y K, indispensables para la buena salud.

Actúa como digestivo, ya que contiene timol que calma los espasmos intestinales y los dolores estomacales.

Sirve para tratar afecciones respiratorias, pues tiene propiedades antiinflamatorias, antisépticas y expectorantes, que actúan contra la gripe, la bronquitis y otros problemas.

Sirve como carminativo, pues elimina gases y flatulencias, disminuyendo la inflamación.