Los quistes renales simples son bolsas llenas de fluido que se forman en los pequeños tubos de los riñones. La inmensa mayoría de estos son lesiones benigna, asintomáticas, que raramente necesitan tratamiento, ya que son un hallazgo frecuente en riñones normales, principalmente en personas mayores de 50 años.
Según señala la doctora Hilda Lafontaine, los quistes renales son un encuentro fortuito en un paciente que se hace un ultrasonido abdominal por algún motivo y en el reporte médico se descubren uno o más quistes en los riñones.
“La primera cosa que se vienen a la cabeza es el miedo de que sea un cáncer de riñón o una lesión que puede llegar a cáncer. Es muy común que los pacientes lleguen a la consulta del nefrólogo o urólogo atemorizados por los quistes, y no es necesario desesperarse, el quiste renal en la mayoría de los casos es una lesión benigna y sin ninguna relevancia clínica “ señaló Lafontaine, directora médico de la Fundación Aslhey Baquero.
Indicó que el quiste renal simple no se torna en cáncer, en la mayoría de los casos no tiene importancia clínica y que es tan común que en personas mayores de 60 años, se considera normal tener hasta 4 quistes en cada riñón.
“En cambio, los quiste complejos pueden ser tumores del riñón con apariencia de quiste; es bueno señalar que no todos los quistes complejos son tumores. Un quiste complejo puede ser un quiste con sangre o pus en su interior o una lesión cicatricial antigua por lo tanto, en esta ocasiones el ultrasonido solo, no puede hacer la diferencia y necesitamos realizar una tomografía abdominal para establecer el diagnostico final o una resonancia magnética. Explicó que si se tiene un quiste simple no se tornará en cáncer, pero si tiene un quiste complejo será necesario una evaluación para saber si la imagen es realmente un quiste o un tumor con característica de quistes.
Manifestó que se considera norma hasta los 30 años, presencia de dos quistes en un riñón o un quiste en cada uno; en edad de los 30 a 60 años la presencia de dos quiste en cada riñón y a partir de los 60 años presencia de un máximo de 4 quiste en cada riñón.
