Panamericanos de Lima
Por fin, la patria de José de San Martín y Simón Bolívar será la sede de los XVlll Juegos Panamericanos, que aglutinará a casi 7 mil atletas con 41 naciones y 39 deportes, del 26 de julio al 11 de agosto.

Varios aspectos son dignos de ser resaltados: el gran esfuerzo de las autoridades y la dirigencia deportiva del Perú, que nunca se rindió para obtener la sede que no pudieron lograr en el 2015, y su interés por brindar los informes económicos para cumplir con los requerimientos de la Odepa y la Carta Olímpica en lo concerniente a la transparencia.

Más de 1, 300 millones de dólares serán invertidos y se ha creado un fondo de más de 100 millones para los imprevistos que siempre están a la orden del día en evento de esta envergadura.

Aunque no son nuestros Juegos por excelencia, nuestro país está en el deber de tener una participación digna, pues fuimos sede de los Panamericanos en el 2003, y ocupamos el décimo lugar con 204 medallas.

No hay dudas de que tenemos atletas con la nombradía mundial para que honremos nuestros símbolos patrios. Tal es el caso del joven Audrys Nin Reyes, quien ha emergido como una estrella mundial en la disciplina de la gimnasia.

Ahora bien, vamos a poner las cosas en su lugar. ¿Cuál es la situación de nuestras federaciones y el Comité Olímpico Dominicano? Muy simple, a casi siete meses de ese magno evento, tenemos la información de que el permisivo presidente del Comité Olímpico Dominicano, Luisín Mejía, no ha presentado al Ministerio de Deportes, el presupuesto para el compromiso patrio.

El presupuesto será de 120 millones, pero no ha sido fruto del consenso con los federados. Ha sido una oportuna iniciativa del Ministerio de Deportes, que dirige Danilo Díaz, pues el permisivo presidente del COD, está preparando maletas para viajar a Suiza a sus compromisos internacionales.

Acontece lo que todos sabíamos, incluso sus mejores amigos: Luisín Mejía no tiene tiempo para ejercer el cargo y mucho menos valor para presentar su renuncia.

Nuestro país tiene que tener una participación honorable, pero debe presentar los atletas con los cuales se pueda obtener medallas. No se trata de cantidad, sino de la calidad. La República Dominicana no es un país rico y debe invertir con garantía de retorno.

He dicho y vuelvo a reiterarlo: El Ministerio de Deportes no puede dejar en manos del COD y su permisivo presidente Luisín Mejía la suerte del deporte olímpico. Es imperdonable que a siete meses de los Juegos Panamericanos de Lima, Perú, el Comité Olímpico Dominicano esté en el limbo y con la renuencia de muchas federaciones, que insisten en que sus recursos sean entregados directamente por Danilo Díaz y no por Luisín Mejía.

La incredibilidad crece como la verdolaga en los predios del COD. Es una verdadera lástima.