Plausible actitud.-
Por Ramón Rodríguez
(centrodeidiomaswashington@gmail.com).-
Dentro del estado angustioso que vivimos los dominicanos como consecuencia de los estragos que ha causado el Covid 19, no podemos ocultar que cuando Isaac Piña Valdivia, Director General de la Comisión de Deporte del estado de Guanajuato, anunció el retiro de la candidatura de la ciudad mexicana de León para la sede de los Juegos Centroamericanos y del Caribe del 2026, dejando a nuestra ciudad de Santo Domingo,como única aspirante, nos alegramos como pueblo, pero nos limitamos a sonreirnos, como aquel niño que tiene una bicicleta nueva, pero que no puede montarla por el momento por prescripción médica.
Mientras tanto, es de justicia significar. que mientras el presidente mexicano: Andrés Manuel López Obrador y Ana Guevara, Directora General de Cultura Fisica y Deportes, hicieron caso omiso a la dirigencia deportiva del hermano país azteca, nuestras autoridades, comenzando con el presidente de la República, Danilo Medina, el ministro de deportes, Danilo Díaz, el alcalde saliente, David Collado, y el Comité Olímpico Dominicano, dirigido por su presidente Luisin Mejía, dieron pronta respuesta, facilitando el aval correspondiente al Comité Organizador, encabezado por José Manuel Ramos y Arístides Fernández Zucco, quienes tuvieron la entereza de hacer la solicitud formal de la sede para los XXV juegos.
Fueron muchos los que comentaron tras bastidores, quizás con razón, de que era una locura competir contra México, nación que buscaba celebrar el centenario de dicho justa. México fue el primer país en montar dicho evento en el 1926. Ahora podemos valorar que valió la pena tomar la iniciativa.
Debemos reconocer que Arístides Fernández Zucco y José Manuel y todos los hombres y mujeres que les acompañaron en este proyecto: que fueron audaces, atrevidos e intrépidos, pues en verdad, muy pocas personas pensaron que ésto podía ser una realidad.
El mensaje queda claro: cuando se toma una decisión con fe y con el apoyo de las autoridades correpondientes, como sucedió en este caso, la mitad del camino ya está recorrido.
Pienso que es plausible, que al recibir la presencia de la prensa deportiva nacional, José Manuel Ramos y Aristides Fernández Zucco, hayan dado la respuesta correcta: ”Estamos contentos, pero en estos momentos debemos enfocarnos en combatir y derrotar al Covid 19, esa es la prioridad del país y luego ya habrá tiempo de celebrar y trabajar.”.
Yo comparto ese criterio de los amigos Ramos y Fernández Zucco, fue una actitud plausible, como elogiosa fue la pronta llamada telefónica del presidente del Comité Olímpico, Luisín Mejía, manifestando su alegría y su disposición de que el COD y todos los federados se integren como un todo, una vez superemos el Covid 19.
Estoy convencido de que el 2026 marcará la consolidación y despegue definitivo del deporte nacional. Aspiramos a que antes de esa fecha, podamos poner en marcha una ley de deportes que establezca claramente los roles de nuestras instituciones deportivas para que se unifique la familia del deporte dominicano.
Santo Domingo 2026. Enhorabuena.
