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El entierro de El Tigre

En el entierro se originaron varios líos que   provocaron  19 heridos. La Policía no pudo contener una  multitud que gritaba eufórica  “déjenmelo  ver”… “déjenmelo ver”

Asistí al entierro del Tigre y no pude contener las lágrimas.

Tan intenso era mi sufrimiento, que José Heredia (Corporancito), mi hermano, y Julito Pérez, enfermos liceístas, me dijeron: “Leo, piensa en tus hijos. Ya el Tigre murió. Esa es la vida”.

Alvarito Arvelo, más liceísta que Pepe Busto, no  asistió al funeral a pesar de que viejos amigos se  le arrodillaron  para que no faltara. No salió de su hogar.

 Gary y Napoleón

 Gary Bautista y Napoleón Aracena, quienes son como hermanos, cayeron en un hoyo en el cementerio y ambos pidieron que los dejaran ahí, a pesar de la insistencia de los bomberos en sacarlos.

      En Cristo Rey

Los líos continuaron cuando la gente no podía entrar al cementerio de Cristo Rey. El  animal fue sepultado allí bajo el alegato de que era un revolucionario.

Boyón Domínguez e Ignacio Capellán fueron golpeados por dos guardias al tratar de entrar, a la mala, al camposanto.

Boyón e Ignacio gritaron  como niños y me dijeron: “Esto es increíble, no poder estar en los últimos minutos junto al Tigre”.

 Los Tobys

Una comisión del Club Los Tobys, encabezada por Nandy Rivas, Dionisio Guzmán, Roosevelt Comazaramy y el doctor Luis Velásquez, asistió al entierro,  vestida de negro y con lentes oscuros para que nadie la viera llorar.

Se desmayaron

Las hermanitas Ingrid y Belkis Aquino se desmayaron.

El esposo de La Morenita Aquino, Saturnino Martínez, presidente del club Mauricio Báez, muy incómodo, expresó: “Yo he sufrido mucho. Sé lo que es eso, pues soy escogidista. Ellas se paran ahorita”.

Melanio Paredes

Melanio Paredes estaba inconsolable y sólo  Rolando Guante pudo calmarlo cuando le señaló: “tú tienes la responsabilidad de miles de estudiantes. No te puedes caer. No es elegante que te vean llorar los muchachos”.

El sacerdote

 El padre Bienvenido, de la iglesia Corazón de Jesús, no pudo oficiar la  misa de cuerpo presente, tras Severito Agüero revelar que el Tigre era protestante.

César y Amaury

Mis hijos César, Amaury y Cecilia duraron tres días sin comer. Me puse furioso y los regañé: “Papá, usted no sabe lo que es sufrir y más ver como murió el Tigre”.

Luisín renunció

Luisín Mejía renunció cuando en el programa “Hoy Mismo” César Medina, su hijo Oscar y Cristian Jiménez mandaron a poner merengue y salsa.

 Julito Hazim

Algo que todo el mundo notó raro  fue la presencia de Julito Hazim y Félix Decena, ex ejecutivos del Escogido.

Ambos lloraban y la gente los acusó de hipócritas, imputándoles derramar lágrimas de cocodrilo.

Carlos Valenzuela

El ejecutivo de Caribe Express, Carlos Valenzuela, sentado en una tumba dijo: “Prefiero que nadie envíe remesas, con tal  de  que el Tigre viva”. 

El Presidente

El presidente Leonel Fernández envió sus condolencias y se excusó, tras un viaje repentino a Rusia a tratar un asunto energético.

El maestro Juan Nova Ramírez dijo el panegírico, pero no pudo terminar cuando de repente llegaron los empleados del cementerio y dijeron: “Mezcla”.

Los gritos llegaron al cielo y con un gran dolor de la multitud, el Tigre fue tirado al hoyo en forma desconsiderada.

¡Paz a sus restos!

Hasta mañana, si Dios quiere, dominicanos.

El Nacional

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