La Dirección General de Impuestos Internos (DGII) necesita el apoyo de los empresarios y sus asesores para que todos los contribuyentes operen bajo las mismas reglas, sin importar la nacionalidad de su capital, las relaciones sociales ni personales, el estatus económico ni las vinculaciones políticas.

La afirmación es de Magín Díaz, director general de la DGII, al participar este miércoles en el almuerzo mensual de la Cámara Americana de Comercio.

Expresó que a cada contribuyente se le cobran los impuestos de acuerdo a lo que manda la ley, siempre tomando en cuenta su realidad económica y la razonabilidad en la aplicación del marco legal.
Díaz afirmó que han decidido hacerle la vida fácil al que quiere pagar y difícil al que no y que para esto trabajan en tres grandes ejes estratégicos: apoyo al cumplimiento voluntario, incremento del control tributario y promoción del desarrollo institucional.

Asimismo, advirtió que el sistema tributario no resiste la postergación de una reforma profunda que actualice el Código Tributario, vigente desde hace más de 25 años, el cual está muy rezagado con relación a lo que son la economía y la sociedad de hoy.

Señaló que esa es una tarea que se debe asumir bajo consenso, con determinación, espíritu de equidad y sin populismo político ni corporativo.

Sin embargo, enfatizó que es muy difícil en el último año de un gobierno discutir las modificaciones del código y que ya es un tema pendiente para las próximas autoridades.

Recordó que el FMI ha hablado de una actualización del marco fiscal y que no hay forma de hacer una reforma tan relevante sin incluir a todos los sectores.

“Hay que prestarle atención a lo que dice el FMI”, expresó.

Dijo que el Código Tributario amerita una actualización importante porque está desde 1992 y que es la hora de sentarse a discutir con todos los sectores.

Reveló que en los últimos tres años las recaudaciones han crecido a dos dígitos y por encima del crecimiento nominal de la actividad económica.

En otro orden, el director de la DGII explicó que la esa entidad ha relanzado la estrategia tecnológica de la DGII en la cual ha invertido US$15 millones, lo que ha articulado una organización tecnológicamente ágil, flexible y alineada a estándares con un nivel de liderazgo dentro del país.