Si últimamente sientes una repentina urgencia de orinar, y la incapacidad de aguantar, por lo que involuntariamente tu orina se escapa, no es algo de lo que deberías avergonzarte, al contrario debes acudir a un especialista, pues puedes estar padeciendo el síndrome de la vejiga hiperactiva.
Según explica el urólogo Robert Mejía, este trastorno del sistema urinario se produce cuando el músculo de la vejiga se contrae de manera hiperactiva (involuntaria), intentando eliminar orina, aun cuando la vejiga no está llena, afectando significativamente la calidad de vida de las personas, pues altera de forma importante las actividades cotidianas de los pacientes, los cuales pueden llegar a sentir vergüenza, pudiendo alejarse de los demás, restringiendo su vida laboral y social, además de que interrumpe el ciclo del sueño y puede causar ansiedad y depresión.

“El principal síntoma es la necesidad urgente de orinar pudiendo tener escapes de orina antes de llegar al baño, orinar con mucha frecuencia, y levantarse a orinar frecuentemente por las noches”, dijo el galeno, quien agregó que esta patología afecta a millones de personas en todo el mundo, y que el envejecimiento aumenta el riesgo de padecerlo.
El doctor Mejía, del Centro de Ginecología y Obstetricia, y Centro Médico Moderno, afirmó durante la entrevista con Qué Pasa! que el síndrome de la vejiga hiperactiva, se puede prevenir, haciendo ejercicios para fortalecer el piso pélvico, limitando el consumo de alcohol, cigarrillo y cafeína, así como previniendo enfermedades como la diabetes, que aumentan sus síntomas.
En muchos casos, el paciente se siente avergonzado y no sabe cómo hablar con el médico sobre su situación o cree que el tratamiento no funcionará, pero sí puede ser de ayuda.
El especialista reveló que un cambio en el estilo de vida, realizar ejercicios de Kegel (aquellos que fortalecen los músculos del piso pélvico que sostienen la vejiga, recto y el útero), llevar un tratamiento farmacológico, o someterse a neuromodulación sacra (estimulación que modula el proceso sensorial para tratar síntomas urinarios), botox intraservical y electroestimulación percutánea del nervio tibial posterior; indicado por un especialista, son alternativas con buenos resultados para la mejoría de la vejiga hiperactiva.