Los haitianos aceptan someterse al chequeo del sistema biométrico para poder ingresar a Dajabón. Javier Balbuena
SANTIAGO.- El intercambio comercial que realizan cada lunes y viernes cientos de ciudadanos haitianos y dominicanos en Dajabón, se inició esta mañana en un ambiente completamente armonioso y con un gran reforzamiento de las medidas de seguridad por parte de las autoridades dominicanas para evitar el trasiego ilegal de armas, productos o sustancias controladas.
Incluso, ya decenas de ciudadanos haitianos se están sometiendo al chequeo riguroso del sistema biométrico para ingresar a territorio dominicano, reportando las autoridades de migración que en los últimos días se han registrado más de 50 mil ciudadanos haitianos con dicho sistema.
El alcalde municipal Santiago Riverón informó declaró esta mañana que desde las primeras horas matinales, decenas de ciudadanos haitianos se encontraban en el paso fronterizo esperando que abrieran el mercado.
Te puede interesar leer: Mercado Dajabón opera con gran afluencia de público
“Aquí todo está transcurriendo con normalidad, cada vez son más los ciudadanos haitianos que vienen a comprarle a nuestros comerciantes”, sostuvo Riverón.
Entre los productos alimenticios de mayor demanda por parte de los compradores haitianos están las pastas alimenticias, huevos, arroz, plátanos, guineos verdes, ajo, cebolla, aceite comestible y pollos vivos y procesados.
Asimismo, los productos enlatados como leche y jugos son adquiridos por los ciudadanos haitianos.
Para transportar las mercancías que compran en territorio dominicano, los haitianos se valen de moto-conchos, motonetas, carretillas y los llamados “poteas”, quienes trasladan los productos a pie no solo por el portón fronterizo, sino hasta cruzando el río masacre.
En días pasados, transportistas haitianos amenazaron con volver a cerrar las puertas aduanales de su país con Dajabón en protesta por los chequeos de parte de las autoridades dominicanas, pero no materializaron dicha amenaza.
Cientos de ciudadanos haitianos también cruzaron por Dajabón hacia su nación para celebrar recientemente en su tierra las navidades y el Año Nuevo.
De los intercambios comerciales que realizan los dominicanos y haitianos se benefician de manera directa e indirecta, cientos de personas, entre ellos transportistas, vendedores ambulantes y comerciantes dominicanos que adquieran productos y artículos de belleza y de otra índole de la vecina nación para revenderlos en el país.