La reunión del secretario general de la OEA, Albert Ramdin, con el grupo de “Amigos de Haití” representa lo que parece el primer paso concreto del organismo para elaborar una hoja de ruta sobre la tormentosa crisis de la vecina nación.
La OEA ha sido duramente criticada, sobre todo por Estados Unidos, por su supuesta inacción para explorar una salida para enfrentar la inseguridad y la violencia que han sumido a Haití en el caos. A petición de Washington en la última asamblea del organismo se acordó aumentar la cooperación de los países miembros para restaurar la estabilidad y la gobernabilidad en Haití.
Hace unos días que el secretario general estuvo por la zona fronteriza, del lado de República Dominicana, verificando el proceso de repatriación de haitianos indocumentados. El organismo dijo que se apresta a presentar próximamente ante el Consejo de Seguridad la hoja de ruta que elabora, la que avanzó estará estructurada en cinco pilares estratégicos.
Puedes leer: Senado enfrenta presión tras controvertida reforma del Código Penal
Desde siempre se ha planteado que la solución a la crisis haitiana pasa por la seguridad, asistencia humanitaria y sanitaria, desarrollo sostenible, consenso político y legitimidad electoral. Pero ahora mismo lo más urgente es enfrentar a las pandillas como principales responsables de la violencia y la inseguridad en la nación. De no someterse a los grupos criminales cualquier hoja de ruta para abordar la crisis haitiana puede darse por fracasada de antemano. Es importante que la OEA lo tenga presente.