La banca múltiple dominicana se erige como uno de los sectores financieros de mayor crecimiento y consolidación de Centroamérica y el Caribe, portadora de buena puntuación en rentabilidad y solvencia otorgada por agencias calificadoras de riesgo, pero el sector productivo apenas recibe el 17.6 por ciento de una cartera de préstamos ascendente a más de 414 mil millones de pesos.

Un informe del Banco Central revela que los bancos comerciales otorgaron al cierre de junio préstamos al comercio y sector servicios por 304 mil 531 millones de pesos, equivalente al 73.4 por ciento, en tanto que la industria y el sector agropecuario apenas consiguieron 72 mil, 897 pesos, un desbalance que es igual a una gran retranca para el desarrollo.

De cada cien pesos que presta el sistema de banca múltiple, 75 son otorgados para financiar importaciones o adquisición de bienes tales como vehículos de lujo, electrodomésticos, viviendas o proyectos inmobiliarios y turísticos, incluido, por supuesto, villas y mansiones.

A causa de la fuerte normativa a que está sometida la banca, los créditos para la agricultura y la pecuaria son de difícil acceso, toda vez que las instituciones financieras deben garantizar elevados porcentajes de aprovisionamiento en cada crédito que otorguen a esos sectores para cubrir la requerida garantía de riesgo.

No se exagera si se afirma que resulta más fácil obtener un préstamo bancario para comprar una yipeta o realizar un viaje a Europa, que uno destinado a financiar cosechas, producir leche, carne o a capitalizar una industria.

El sector financiero posee sobrada liquidez para motorizar el crecimiento y desarrollo de la plantilla productiva, como lo demuestra el hecho de que sus depósitos al mes de junio ascendieron a 605 mil 365 millones y de que la mayor parte de esos recursos son operados por bancos nacionales.

La banca dominicana genera más de 24 mil empleos directos, que reportaron salarios por más de 15 mil millones de pesos y además aporta más de cinco mil millones en contribuciones al Sistema de Seguridad Social y al Fondo de Pensiones, pero ese gigante no ha podido aún satisfacer ni mínimamente la demanda de crédito del sector productivo nacional.

En el marco de las reformas prometidas por el próximo gobierno del presidente Danilo Medina, es imperativo incluir a la banca múltiple, a los fines de que se abran las compuertas del préstamo bancario hacia el fortalecimiento del capital de trabajo y para el financiamiento de la producción de bienes agrícolas y pecuarios. Urge democratizar el crédito.