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El voto manual

El voto manual

José Antonio Torres

Los seres humanos somos animales sociales. Nuestras necesidades básicas y afectivas a menudo dependen de los demás y para ello necesitamos la confianza, ya que sólo a través de la confianza se puede establecer un vínculo afectivo entre sociedad e individuo.

En sociología y psicología social, la confianza es la creencia en que una persona o sociedad será capaz y deseará actuar de manera adecuada en una determinada situación. La confianza se verá más o menos reforzada en función de las acciones.

Por esa razón, y tras la Junta Central Electoral (JCE) dar a conocer la resolución 34-2022 que establece el voto y escrutinio manual en las elecciones de 2024, los sectores sensatos de la sociedad vienen manifestándose a favor de la misma.

Pues ocurre que tras el desastre con los equipos electrónicos en las elecciones municipales de 2020, que obligó a la JCE a posponer esos comicios, de febrero para mayo, la gente comenzó a desconfiar en ese sistema de votación y conteo.

Pero ocurre que cuatro meses antes, el PLD había utilizado un sistema similar, en sus primarias del 6 de octubre de 2019, dejando como resultado la división de ese partido, tras varias semanas de denuncias de que el sistema había sido manipulado por uno de los grupos que se disputaban la candidatura presidencial.

Aunque la resolución de la JCE le pone la tapa al pomo, la posibilidad de automatizar el voto en los comicios del 2024 estaba cerrada por el momento, por decisión del Tribunal Constitucional, que declaró inconstitucional el artículo 99 de la Ley 15-19 de Régimen Electoral.

En ese sentido, considero prudente y adecuado, el contenido de la resolución preliminar 34-2022, emitida por la JCE para reglamentar la votación y escrutinio manual, así como la digitalización, el escaneo y la transmisión de los resultados electorales en los comicios de 2024.

No obstante, la implementación de esa resolución implicará retos para la JCE, para los partidos políticos y para los observadores, que deberán reclutar al personal que trabajará en los colegios y capacitarlos oportuna y adecuadamente.

Aunque para muchos este método es volver al pasado, a veces hay que dar un paso atrás para tomar impulso.