Experto plantea puntos servirían de “candado” a la Constitución

El experto constitucionalista Cristóbal Rodríguez plantea establecer en una nueva Carta Magna que quien ejerza la Presidencia de la República no pueda beneficiarse de ningún cambio en ella, también que se mantenga el actual sistema del derecho de aspirar a dos períodos consecutivos y nunca jamás.
En una entrevista exclusiva para El Nacional, el reputado jurista sostiene la necesidad de que la ley de convocatoria de la Comisión Revisora debe dejar de ser una legislación ordinaria y convertirla en una ley orgánica. Así como también las decisiones de dicha asamblea se aprueben con las dos terceras partes de los presentes y no de la matrícula.
Sostuvo que por esa razón propone que se establezca una prohibición expresa en la Constitución para que un presidente en ejercicio no se le permita continuar en el poder más allá de lo que establece el artículo 144 de la Constitución actual.
“Creo que deben incrementarse las mayorías para la aprobación de la ley que declara la necesidad de la reforma constitucional, convirtiéndola de una ley ordinaria, que es en la actualidad, a una ley orgánica para cuya aprobación se necesita una mayoría de dos terceras partes de los miembros de una y otra cámara”, explicó.
Otra parte de su propuesta consiste en incrementar la regla o modificarse para incrementar la mayoría, de modo que las decisiones de la Asamblea Nacional, actuando como órgano de revisión de la Constitución, se apruebe con una mayoría de dos terceras partes de los presentes.
Explica que esa mayoría a debe ser de dos terceras partes (132) de la matrícula de la Asamblea Nacional constituida por la suma de 190 diputados y 32 senadores, o por tres cuartas parte en los presentes en la sesión en la que se apruebe el texto de modificación si la modificación es sobre la reforma de la Constitución.
“Estoy seguro que sí alguien lograra salvar esos requisitos, dificultosos de salvar, debe obligarse a que la reforma con vistas a modificar el sistema de selección tenga que ser sometida a un referéndum aprobatorio”, expuso.
También sugiere que se establezca un párrafo adicional en el artículo 272 para que el referéndum aprobatorio cuando la reforma verse sobre el tema de la reelección presidencial, sea válido, en vez de una mayoría de una tercera parte de la matrícula electoral, ese umbral de mayoría se lleve a dos terceras partes, es decir, para que el referéndum sea válido debería participar en el mismo, por lo menos el 66.66% de todos los inscritos en el Padrón Electoral. Yo creo que si la sociedad dominicana, el liderazgo político, social, eclesiástico, de la sociedad civil, los líderes empresariales logran un acuerdo sobre ese tema, una reforma constitucional sería ganar para la sociedad dominicana.
“Es una unificación que en mi modo de ver, debe ser una unificación sólo para las elecciones de mayo, con la idea de que en un evento de reforma constitucional podamos volver a las elecciones separadas por dos años”. Hay gente que confunde la separación de las elecciones por dos años con la separación de las elecciones por tres meses, no son mecanismos de separación equiparables, es decir, yo creo que hay problemas que tienen que ver con la saturación el calendario electoral.
Unificar elecciones
Indicó que para las primaras de octubre empezó hace rato la campaña, y que el país llegará a febrero en el marco de procesos no resueltos de las primarias de octubre, antes de que concluyan las primarias de octubre habrá empezado la campaña para las elecciones de febrero, en el marco del proceso electoral de febrero del año próximo habrá empezado la campaña electoral oficialmente para las elecciones de mayo y hay la posibilidad de una segunda vuelta electoral. Explicó que además de eso, las elecciones de febrero del 2020, en este caso actúan como un pronóstico de las elecciones de mayo para cuyos resultados no habrá el espacio de tiempo necesario para que candidato del partido perdedor en las elecciones de febrero pueda recomponer su mercado electoral de cara a las elecciones presidenciales y legislativas del mes de mayo. “Esto hace, entonces, que la pugna y los conflictos tiendan a incrementarse de manera considerable, porque todo el mundo va a querer reclamar la victoria, nadie va a aceptar de vuelta adelante que perdió en febrero, cuando sabe que perder en febrero, desde el punto de vista de la banca del partido y del candidato presidencial, es una mala señal para los resultados de las presidenciales de mayo”, concluyó. Aclaró que el tribunal superior electoral es único en el país y es el que debe conocer de todos los procesos que lleguen a las juntas municipales y para eso tiene plazo límite que es el 23 de abril del 2020 porque el 24 de abril por mandato Constitucional los funcionarios electos en las elecciones de febrero deben de tomar posesión. “Entonces, qué es lo que vamos a tener? Un virtual colapso del sistema de resolución de disputas a nivel de las juntas municipales y del Tribunal Superior Electoral que compromete la paz, la tranquilidad y el sosiego mínimo que debe de existir para las elecciones presidenciales y congresionales, a esto hay que sumarle el problema del incremento del costo qué es lo que la mayoría de los analistas ponen de relieve en primer lugar pero que a mi juicio no es lo más importante”, manifestó
Y agregó: “Lo más importante desde mi lectura del proceso es que la unificación de las elecciones puede operar como un remedio para prevenir situaciones indeseadas de violencia, de desasosiego y de falta de tranquilidad para el proceso presidencial del 2020”.
Concluyó que desde su punto de vista ese no es el principal problema, es decir, que si se unifican las elecciones se disminuye el gasto, sin dudas, e insistió en que los temas prioritarios que ameritan una evaluación de fondo sobre la unificación de las elecciones no son de índoles económicos sino de que haya tiempo para dirimir los conflictos en los tribunales.