SANTIAGO.-La Arquidiócesis local de la Iglesia Católica reconoce los aportes y consejos que ofrecen los abuelos y ancianos a las familias, por lo que exhortó a los ciudadanos para que no los abandonen y máxime cuando necesitan de la ayuda para comprar alimentos o medicinas.
En el comentario editorial titulado “El dolor no espera”, el semanario nacional católico Camino en su próxima edición que circula a partir de este próximo domingo 3 de agosto, también se refiere al mensaje que envía el Papa León XIV en ocasión de conmemorarse la Quinta Jornada Mundial de los Abuelos y los Ancianos.
“La vida de la Iglesia y del mundo, en efecto, sólo se comprende en la sucesión de las generaciones, y abrazar a un anciano nos ayuda a comprender que la historia no se agota en el presente, ni se consume entre encuentros fugaces y relaciones fragmentarias, sino que se abre paso hacia el futuro”, indica Camino en su nota editorial.
Precisa que los abuelos son un manantial de sabiduría y su experiencia acumulada los convierten en un libro cuyas páginas nos enseñan el camino recto, y la prevención de fracasos en vida, lo cual es un gran tesoro.
“Cuán a menudo nuestros abuelos han sido para nosotros ejemplo de fe y devoción, de virtudes cívicas, y compromiso social de memoria y perseverancia en las pruebas, por lo que ese legado que nos han transmitido con esperanza y amor, siempre será para nosotros motivo de gratitud y de coherencia”, puntualiza el vocero escrito de la Iglesia Católica Dominicana.
Indica que actualmente, muchos de nuestros abuelos y ancianos están pasando por momentos muy difíciles porque cuando ya se agotan sus fuerzas y llegan las enfermedades no encuentran el apoyo necesario para adquirir los medicamentos que necesitan para aliviar sus dolores, y recuperar la salud.
Señala que muchas familias dominicanas ven consumirse su pobre presupuesto comprando las medicinas cada día más caras, y que sus seres queridos usan de manera continua, lo que crea angustia que se va transformando en un deterioro de su salud mental.
Pide a los sectores que trabajan en el área de la salud, que busquen mecanismos para que se frene la escalada alcista de los medicamentos.
“De no hacerlo estarían acelerando la muerte de tantos dominicanos y dominicanas que se sienten olvidados por quienes están llamados a proteger a nuestros adultos mayores para que lleven una vida mejor, y no cuando están en el ocaso de su existencia”, concluye Camino.