CINCINNATI – En un cambio de una tendencia reciente, el lanzador de los Rojos Luis Castillo evitó la trampa de la primera entrada que hizo que muchas de sus aperturas anteriores comenzaran con el pie izquierdo. Pero Castillo no pudo evitar que los Cachorros lo golpearan durante la derrota por 3-2 el sábado en el Great American Ball Park.

Cincinnati ha perdido cada una de las últimas cuatro aperturas de Castillo. En esos juegos, tiene marca de 0-2 con efectividad de 5.59. En general, tiene una efectividad de 6.07, ya que el derecho no ha encontrado completamente el ritmo que lo puede hacer tan frustrante para los bateadores rivales.

“Las cosas en las que el entrenador de lanzadores [Derek Johnson] y yo trabajamos en el bullpen parecían estar haciendo clic esta vez. Creo que definitivamente hemos estado progresando”, dijo Castillo a través del traductor Jorge Merlos.

En cinco entradas y un tercio, Castillo permitió tres carreras y ocho hits con una base por bolas y cinco ponches. En su inicio anterior contra los Cardenales el domingo pasado, se desvió de la combinación de bola rápida y cambio de velocidad que a menudo lo hace exitoso y fue más pesado con los deslizadores.

Pero el sábado, Castillo volvió a su pan y mantequilla. Según Statcast, el 38 por ciento de sus 94 lanzamientos fueron cambios, el 43 por ciento fueron rectas de cuatro costuras y el 12 por ciento fueron deslizantes.

“La precisión de los lanzamientos fue bastante buena hoy, especialmente mi cambio fue muy bueno”, dijo Castillo. “Todo depende de lo que estén haciendo los bateadores y de lo que esté sucediendo en el juego. Afortunadamente, en lo que estuvimos trabajando, especialmente en la recta de cuatro costuras, también estuvo funcionando muy, muy bien”.

“Estaba de pie más recto, levantaba un poco más mi pierna y también estaba entregando más rápido al plato”, dijo. “Esos me dieron mejores resultados hoy”.

Castillo, quien tuvo una efectividad de 19.80 con 14 hits y tres jonrones permitidos en sus cinco primeras entradas anteriores, lució dominante al principio. Retiró a sus primeros seis bateadores, con cuatro ponches.

“Al principio pienso que fue realmente bueno”, dijo el manager de los Rojos, David Bell, sobre Castillo. “Hizo un trabajo fantástico contra una alineación difícil para mantenerse ahí una vez que anotaron un par de carreras”.