La salud de los sextillizos que nacieron el domingo en el hospital Reynaldo Almánzar, de Villa Mella, evoluciona de forma satisfactoria al igual que su madre, la cual fue sacada hoy de cuidados intensivos y llevada a una habitación privada. El subdirector de dicho centro materno, Franklin Gómez, explicó que Aracely Guzmán Martínez y sus seis hijos están evolucionando “muy bien”.
“Los niños también siguen evolucionando de forma satisfactoria y están muy bien gracias a Dios”, señaló Gómez. El médico señaló que todavía ninguno de los recién nacidos ha necesitado respiración artificial “y eso es muy bueno, porque aunque el ventilador ayuda a sobrevivir también tiene complicaciones agregadas y el organismo reacciona diferente a ese cuerpo extraño”.
La señora, de 32 años, que se recuperara de la intervención postquirúrgica, fue transferida a la habitación 419 de esa maternidad bajo los cuidados del equipo médico. “Por la condición de la paciente, fue llevada a una habitación privada donde ella pueda estar con sus familiares y no interfiera con pacientes que estén al lado, es decir, donde tenga más privacidad”, indicó el galeno.
Mala práctica, o no
La abuela de los seis hijos, Trinidad Martínez, explicó que su hija Guzmán Martínez había perdido embarazos y que luego de someterse a un proceso para su fertilidad fue que obtuvo el embarazo múltiple.
Aunque el doctor Gómez explicó que no necesariamente el embarazo múltiple se debe a mala práctica médica, nadie tiene un embarazo de esa naturaleza sin ser sometida a una técnica de reproducción asistida.
Los recién nacidos son tres varones y tres hembras, con un peso que oscilan entre las 3.5 y 2.2 libras, y responden «satisfactoriamente considerando su prematuridad y los altos riesgos que implica un embarazo de 34 semanas.
Sus nombres son Jefferson, Jeison y Anderson Yunior, mientras que las hembras se llaman Ashley Margarita, Aleisha Vanesa y Sarai Trinidad Figuero Guzmán.