CLEVELAND – Cuando los Indios adquirieron por primera vez a los torpederos Amed Rosario y Andrés Giménez en el intercambio que envió a Francisco Lindor y Carlos Carrasco a los Metros, la esperanza era que Giménez asegurara la vacante que quedaba en el campo corto en el futuro previsible. Pero Rosario está haciendo un caso convincente para regresar a esa posición en 2022.
Quizás el objetivo siga siendo que Giménez sea la solución a largo plazo, pero mientras tanto, Rosario se ha ganado la oportunidad de verlo más tiempo en las paradas cortas.
Su defensa puede acertar o fallar a veces, pero su bate ha sido la única constante en la ofensiva de Cleveland esta temporada. Ese resultó ser el caso nuevamente el martes por la noche, cuando consiguió un hit en su décimo juego consecutivo en la derrota 7-3 ante los Vigilantes en Progressive Field.
Cleveland no logró alcanzar su primera racha de cuatro victorias consecutivas desde el 14 al 17 de junio, pero se sentó y observó a Rosario continuar en el plato. Estableció un récord en su carrera con su racha de hits de 10 juegos (su mejor récord anterior fue de nueve juegos consecutivos en 2019), registrando uno de los seis hits de Cleveland en el primer partido de la serie. En sus últimos 21 juegos, Rosario está bateando .400 (de 90-36) con 16 carreras impulsadas, incluyendo de 3-1 con una base por bolas y una carrera anotada con un elevado de sacrificio de Franmil Reyes contra Texas.
“Ha tenido un año interesante, en cierto sentido”, dijo el mánager interino DeMarlo Hale durante el fin de semana. “Creo que una vez que se sintió cómodo, [Terry Francona] lo puso en ese segundo espacio y simplemente lo dejó allí. Creo que se ha puesto cómodo. Ha jugado el juego durante varios años a este nivel. No es nada sorprendente para mí”.
El éxito de Rosario está lejos de ser una nueva historia este año. Aunque la mayoría de sus métricas ofensivas (como el porcentaje de barril, la tasa de persecución y la velocidad de salida promedio) no se ubican favorablemente entre los bateadores de las Grandes Ligas, según Baseball Savant, aún se las arregló para encontrar una manera de embasarse consistentemente. Pero con una mejora dramática en su tasa de batazos duros, que pasó de 33 a 42,6 de 2020 a 21, y una disminución en su porcentaje de ponches, Rosario ha sido recompensado por poner la bola en juego.
“Creo que la clave es apegarme a mis rutinas”, dijo Rosario a través del intérprete del equipo Agustín Rivero el sábado. “Mes tras mes, ser capaz de mantener mis rutinas es lo que me ha permitido desempeñarme como lo he hecho”.
Los números ofensivos de Rosario han aumentado durante el último mes, y la incorporación del jardinero Myles Straw en la parte superior del orden puede haber jugado un papel decente en ese ascenso. Straw fue adquirido en la fecha límite de intercambio de Houston y entró el martes en el cuarto lugar en porcentaje de contacto (88.7%) entre todos los bateadores calificados en las Grandes Ligas. Y con su bate justo delante de Rosario en el orden, el segundo bateador de los Indios ha visto su promedio de bateo pasar de .261 a .289.
“Sin duda es muy útil tener a alguien con mucho contacto como él”, dijo Rosario. “Personalmente, creo que él también me ayuda cuando se trata de carreras impulsadas porque siento que la mayoría de mis hits o dobles resultan ser carreras impulsadas”.
Será difícil ignorar la producción de Rosario cuando se mire hacia el 2022. Los Indios tendrán un rompecabezas difícil de armar esta temporada baja, especialmente en el cuadro medio. Aparte de Rosario y Giménez, el club cuenta con los jugadores del medio del cuadro Owen Miller, Ernie Clement y Gabriel Arias que ya están en la lista de 40 hombres, con Tyler Freeman, Richie Palacios (quien probablemente será más un jardinero en las grandes ligas) y Brayan Rocchio para protegerse del Sorteo de la Regla 5.
Pero Rosario ha hecho una fuerte demostración de lo que puede ser cuando tiene un tiempo de juego constante en una posición en la que se siente cómodo. Y durante el resto de esta temporada, continuará trabajando para demostrar que puede ganarse este lugar una vez más el próximo año.
“Creo que se siente cómodo y está jugando a un cierto nivel que esperamos”, dijo Hale. “Y eso es lo que tratamos de predicarle a este equipo. Se espera que juegues a cierto nivel. Y es bueno ver que está teniendo este tipo de año”.
