CIUDAD DEL VATICANO. AFP. Los abusos sexuales de niños por sacerdotes irlandeses, cubiertos durante décadas por su jerarquía, son «actos particularmente odiosos», dijo el lunes el número dos del Vaticano, Tarcisio Bertone, ante obispos irlandeses antes de que estos sean recibidos por el Papa.
«Sus comunidades están viviendo una dura prueba debido a que algunos clérigos están implicados en actos particularmente odiosos», dijo el cardenal en la homilía celebrada en el Vaticano con el episcopado irlandés.
Para la Iglesia, «las pruebas que surgen en su seno son naturalmente más duras y humillantes», pero «deben convertirse en motivo de purificación y santificación, siempre y cuando sean iluminada por la fe» y que «el pecador reconozca su falta», agregó.
El Papa convocó el lunes y martes al conjunto de los obispos de Irlanda, una treintena, para restablecer la confianza con los fieles de ese país, en el que durante varias décadas sacerdotes cubiertos por su jerarquía abusaron sexualmente de centenas de niños.
El 11 de diciembre pasado, en audiencia con el cardenal Sean Brady, primado de la Iglesia de Irlanda, el papa Benedicto XVI había calificado esos abusos de «crímenes abominables».