Antes de convertirte en madre seguro cuando te preparabas para ir a la playa te emocionabas por lo divertido y relajante del espacio.
Ahora que tu bebé tiene varios meses quieres vivir esa experiencia con él, pero te cuestionas ¿Es un lugar seguro para mi pequeño? ¡Tranquila, respira, relájate! Aleja todos los pensamientos negativos.
Lo primero que debes hacer es elegir bien el destino, una playa donde no frecuenten tantas personas y que tengan algunas palmas donde refugiarse del sol.
Protégelo del sol: lleva protector solar específico para su edad, no olvides ponerle ropa fresca con colores claros, un sombrerito con visera y lleva una sombrilla. Recuerda que la piel de los bebés es muy delicada y deben mantenerse la mayor parte del tiempo bajo la sombra. Los ojos también son importante así que cómprale unas gafas.
Bebé hidratado: es importante mantenerlo hidratado, llevar agua suficiente o darle el pecho más a menudo para evitar la deshidratación. Puedes llevar además algunas frutas que contengan agua.
Chapuzones: Al meterlo al agua, primero siéntalo a la orilla del mar para que pierda el miedo. Al tenerle un poco más de confianza no lo zambullas, debes tener cuidado con el movimiento de las olas, estas pueden ser traicioneras. Es recomendable entrarlo al agua con un salvavidas (que tenga un tipo de sombrilla), pero ¡Cuidado! Nunca lo sueltes.
La seguridad para el bebé también debe ser fuera del agua, siempre manten lo vigilado. No olvides un estuche de emergencias, y todas sus medicinas por alguna eventualidad.
Recuerda
Si tu bebé tiene seis meses, aun no es hora de llevarlo a la playa, debido a que estos tienen la piel más sensible a los rayos del Sol, y no están preparados para usar cremas protectoras, debido a que estas pueden causarle una reacción alérgica.
