Ni los agentes policiales han estado exentos de abusos cometidos por superiores y patrullas en operativos con el supuesto propósito de resguardar la seguridad y el orden público. Ahora que se está en proceso de reestructuración del cuerpo son muchas las denuncias y los casos de los que se reclama una justa investigación.
Ernesto Bienvenido Sánchez fue detenido y cancelado de la Policía por supuestas faltas graves por defender la inocencia de un hermano suyo que había sido apresado frente de su residencia y maltratado por una patrulla.
Aunque se identificó como raso del cuerpo, denunció que sin escucharlo un coronel incurrió en un abuso al recomendar su cancelación sin él haber incurrido en falta alguna, por lo que ahora reclama que se ordene una investigación.
Como el de Sánchez, un joven que dice solo desea superarse, que nunca había tenido problemas y residente en el sector de Gualey, son muchos los casos que se han reportado. En el proceso de reforma y saneamiento a que se aboca el cuerpo bajo la gestión del mayor general Eduardo Alberto Then los delitos tienen que perseguirse y castigarse, pero los abusos tienen que repararse.