Tener un propósito definido II

A mi hermana Yve que anda de cumpleaños.

Nos referimos, en la entrega anterior, a que es vital para poder afrontar esta difícil tarea, pero hermosa, que es vivir tener claro hacia dónde queremos ir. Citamos a Denzel Washington y cerramos con Pepe Mujica: “Cada quien debe tener un objetivo en la vida y pelear con todas sus fuerzas por él”. «No soy adicto a vivir mirando para atrás, porque la vida siempre es porvenir y todos los días amanece».

Estoy plenamente de acuerdo con Denzel y Pepe, pero quiero precisar tres aspectos que no aparecen en sus testimonios de vida, el primero que hay que dejar atrás la pobreza material y sobre todo la mental, disponer de oportunidades para lograrlo y contar con compañía en el camino.

No creo que se deba aspirar a ser tan rico como el director de uno de los puestos de bolsa más importante de Wall Strett, Ken Griffin quien se dio el lujo de comprar, batiendo el récord de la casa más cara en Estados Unidos, en 2019: 238 millones de dólares en un apartamento en Nueva York. También había adquirido una mansión en Londres por 122 millones de dólares, una casa de 100 millones en los Hamptons y una finca de 130 millones cerca de Mar-a-Lago.

Y extendía cheques de caridad de cantidades tan importantes como casi 700 millones de dólares a organizaciones benéficas relacionadas con el arte y la educación. También gastaba generosamente en arte, como los 100 millones de dólares que pagó por un Basquiat, 300 millones por un Willem de Kooning y 80 millones por un Jasper Johns.

A saber cuánto llegó a gastarse en su segunda boda, que tuvo lugar durante dos días en Versalles y que incluyó una recepción en la villa privada de María Antonieta”. (“La Red antisocial” de Ben Mezrich, página 178). Ese no “anda ligero de equipaje” y eso implica “algo más que salud”.