40 Años de médicos
El 30 de noviembre de 1975 partimos, por diferentes medios, de Santiago para la capital diez jovenes con la intención de iniciar estudios en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD). Siente de ellos seleccionamos medicina. Habíamos alquilado una casa en comun, compramos una estufa pequeña, una nevera usada y algunos ajuares de cocina. No tardamos en entender que la conviviencia social de 10 muchachos de clase media no estaba clara en los libros de Marx, Engels o Martha Haenecker y nos desperdigamos al siguiente semestre.
Pero ese mismo día, de todos los recónditos lugares del país habían salido, para lograr el sueño de ser profesionales miles de otros jovenes, y los que coincidimos en la carrera de medicina una parte pudimos alcanzar la meta en el plazo previsto: 28 de octubre de 1983. Del grupo de Santiago nos graduamos Jorge Aguilera, Bruno Hernández y un servidor.
La promoción ha sido una de las que ha mantenido su unidad, especialmente a través de las redes sociales, impulsados, principalmente por un colega de una gram empatía que se radicó temprano en Estados Unidos y ha tenido un ejercicio exitoso, el compañero Héctor Reyes. Pero si se fijan bien un simple cálculo matemático le dirá que este próximo sábado estaremos celebran 40 años de graduados y eso no es “paja pa la garza”.
Nos envestimos 383 médicos ese día, algunos venían de promociones más rezagadas, pero la gran mayoría era de ese grupo de ilusos que empezamos a recibir clases el 1ro. de noviembre de 1975. Algunos fallecieron antes de terminar la carrera y otros tantos después, pero la promoción se ha mantenido fuerte con muchos profesionales destacados y una buena parte se juntará desde mañana en un hotel de Puerto Plata a celebar 40 años de un logro compartido, y para ver cuán viejos estamos, especialmente el que les entrega a ”algo más que salud”.