Redacción BBC Mundo.- En América Latina son cada vez más los países que quieren dejar de ser simples compradores de armas, para buscar ser parte del controversial negocio de venderlas. En días recientes, por ejemplo, medios colombianos anunciaron que una empresa de propiedad del estado, Indumil, estaba buscando exportar bombas fabricadas en Colombia a países de Oriente Medio.
Y es que con un valor estimado en más de US$76.000 millones anuales, el comercio internacional de armamento es un enorme y muy lucrativo negocio.
En el contexto latinoamericano el líder indiscutible de ese negocio es Brasil. La mayor nación de América Latina lleva décadas exportando armamento.
Y aunque no es la única de la región en hacerlo, ha avanzado mucho más que cualquier otra de sus vecinas en desarrollar su tecnología bélica en áreas que resultan atractivas a naciones compradoras de armas en otros continentes.
Pero, poco a poco, le está saliendo competencia.
Chile y Ecuador
Efectivamente, según cifras del Instituto Internacional de la Paz de Estocolmo (Sipri, por sus siglas en inglés, una entidad no gubernamental sueca que rastrea las ventas internacionales de armas), además de Brasil hay otras dos naciones de la región que se han destacado en los dos últimos años en ese campo: Chile y Ecuador.
Medidas a precios constantes en dólares de 1990, las exportaciones brasileñas durante 2014 y 2015 llegaron a US$85 millones, comparado con US$20 millones para Chile y US$6 millones para Ecuador.
Exportadores en AL
Monto de las exportaciones en 2014-2015 (medidas en US$ millones constantes de 1990)
85 Brasil, 20 Chile, 6 Ecuador
Aunque Alejandro Sánchez, analista de seguridad internacional, le dijo a BBC Mundo que, más que armas de fabricación propia, en buena parte las cifras reportadas para esos dos últimos países pueden estar indicando lareexportación de armas compradas originalmente a fabricantes tradicionales.
Y, en el caso chileno, también de la modernización de algunos buques militares en astilleros locales.
Sánchez también menciona esfuerzos por desarrollar la industria militar peruana.
Y los medios colombianos han reportado esfuerzos anteriores por la industria militar colombiana de exportar en bajas cantidades, que en 2010 alcanzaban menos de US$1 millón.
En cualquier circunstancia las cifras del negocio en América Latina son muy pequeñas comparadas con las de los pesos pesados del mercado.
Las ventas de armas de Estados Unidos en 2014-2015 alcanzan los US$20.000 millones, seguidas por Rusia con US$10.900 millones, indica la base de datos de Sipri.
Década del 80
El historial de Brasil en la exportación de armas es único en la región.
Brasil empezó a exportar a gran escala en la década de 1980, llegando a ser entonces la sexta mayor exportadora de armas en todo el mundo.
El gobierno militar que estuvo en el poder hasta1985 había auspiciado la creación de empresas industriales, como Engesa, que empezaron a desarrollar armas propias, entre otras cosas para evitar que Brasil tuviera que depender de otras naciones para su armamento.
Eso era especialmente importante en momentos en que vendedores tradicionales de armas como Estados Unidos imponían condicionamientos por derechos humanos a varios países de la región.
Pero Brasil descubrió que además de reemplazar importaciones de armas, sus productos encontrarían grandes mercados en el extranjero.
Venezuela y Brasil mayores compradores
Venezuela y Brasil son los ejemplos más notorios de esta tendencia a armarse en la región.
El primero pasó de ser el importador número 46 del mundo a la posición número 15 (lo que según Sipri es un aumento en sus importaciones del 555%), gracias en parte a acuerdos con Rusia.
Brasil, por un lado, es el principal exportador de la región, con aviones como los Super Tucano, producidos por Embraer para labores de contrainsurgencia.
Pero por otro, firmó un acuerdo con Francia para convertirse en una de las siete naciones capaces de diseñar y operar submarinos nucleares.
El acuerdo, de US$14.000 millones en equipamiento militar, fue considerado el mayor gasto de este tipo en más de medio siglo para el gigante sudamericano.
EL DATO
Acuerdo
Durante casi todo el mes de julio de 2012, los 193 miembros de Naciones Unidas negociaron lo que fue el primer tratado para asegurar que el comercio mundial de armas no se desvíe para contribuir a los conflictos armados y a la violencia.