Gracias a la mediación del papa Francisco y posiblemente al desaparecido Nelson Mandela, el formal restablecimiento de relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos es prácticamente una realidad. Tras más de 50 años de hostilidades, el día 20 de este mes el mundo presenciará el gran acontecimiento que marcará la apertura de embajadas entre ambos países.
El presidente Barack Obama pasará a la historia por protagonizar el deshilo y derribar el único muro que quedaba de la Guerra Fría. El canciller John Kerry no ha descartado viajar próximamente a La Habana para ultimar los detalles de las aperturas de las sedes diplomáticas.
Y en su visita oficial tanto a Cuba como a Washington, el papa Francisco recibirá las explicaciones correspondientes sobre una de las misiones más trascendentales de su pontificado. Para despejar obstáculos Obama ha pedido al Congreso que levante de inmediato el embargo económico contra Cuba, considerándolo un rotundo fracaso