Semana

Cuartería: Realidad expresada en poemas

Cuartería: Realidad expresada en poemas

El autor, nacido en Santo Domingo, Distrito Nacional, en el ensanche La Fe, reconocido poeta y narrador, vuelve y nos demuestra que el tema menos pensado puede ser objeto, por sensibilidad de la palabra poética. Sin duda este es un poemario que sorprende y demuestra los aciertos del autor en la poesía.

Lo que demuestra que hay temas de los que no se puede escribir, cantar o meditar sin una pasión reflexiva contenida.Al cantarle, puntualizo, que este tipo de abordaje en poesía no está de moda.

Cuartería, libro de poesía de Eloy Alberto Tejera (editora Búho, 2025) da testimonio de que no hay tema caduco en poesía, lo que falta es tratamiento con valor de creación y sensibilidad artística.

Lo que llevaría al autor, poeta, narrador y periodista a negar cualquier “caducidad” de temas (nada más hay que recordar a Jazz, poesía). Con Cuartería cualquier lector ligero podría pensar en la poesía social. La subjetividad del tratamiento lo niega.

Las cuarterías fueron un fenómeno urbano, de gente desplazada de las ciudades del interior y de los mismos barrios.

La edificación, generalmente, contaba con sala, dormitorio y cocina. El dueño generalmente vivía en la parte delantera de la edificación y la cuartería en el patio.

Tenía un baño-sanitario para uso común. Y en lo que respecta al costo de cada espacio de alquiler, de bajo precio. Así fue hasta la década de los ochenta. Así que hablo de las cuarterías de los cincuenta, sesenta, setenta y ochenta.

Hoy todavía se resisten a desaparecer, principalmente en los barrios de Villa Juana, Villa Consuelo, Ensanche La Fe y Villa Agrícolas.

De seguro que hay poemas de autores dominicanos dedicados a cuarterías, pero no un poemario completo como al efecto lo hace el poeta Eloy Alberto Tejera en este nuevo libro del autor de El día que Balaguer muera, novela (2001), Jazz, Poesía (1998), Historias crueles de NY y otras latitudes, cuentos (2021) y media docena más de textos entre la poesía, la narrativa y el periodismo con una visión muy personal.

En este libro, el poeta nos define las cuarterías: “Las cuarterías bellamente afean la geografía” y yo me pregunto: ¿De la manera de vivir de quienes las viven en la realidad o de quienes las viven en el recuerdo? El autor nos introduce al mundo de las cuarterías, no crudamente sino con versos luminosos y acompaña el tratamiento del tema envolviéndonos en la atmósfera de subjetividad que le es propia al poema.

Al poemario Cuartería le acompaña una portada donde pernoctan las ensoñaciones de un barrio. En los poemas el autor desarrolla con la subjetividad que le es afín el tema como un faro en un mar tormentoso, sin dejar de lado que en los poemas evocadores y enunciadores es donde vive la cuartería y también quienes las habitan, hombres de trabajos humildes, prostitutas, el matón y el ladrón del barrio como también el que sueña un espacio mejor para vivir, y al conseguirlo, mudarse, sin que jamás olvide donde vivió y soñó.

En las cuarterías, sus habitantes se trataban como una familia, con sus diferencias, por supuesto, pero que se zanjaban una vez se presentaba algún acontecimiento que trastornaba el espacio en común, de forma pacífica.

En este nuevo libro, el autor nos da una nueva voz de solidaridad con un pasado y un presente (cada vez son menos las cuarterías en los barrios por la movilidad social) que se suicidan a diario.

En este poemario el autor nos demuestra su sensibilidad social, con un tema tan alejado de la poesía joven dominicana, digamos vuelve, queriéndolo o no, a darnos en la cara, en medio de los ojos y la mirada, un golpe con la mano abierta a una realidad, con el poema como lanza y con la punta envenenada; deudas y denuncias, el goce de la poesía por la palabra poética y la sensibilidad harto demostrada por Eloy Alberto Tejera, tanto en prosa como en verso.
El autor es escritor.