Día de verdades
Hoy, 15 de mayo, llega a su final una carrera de múltiples posibilidades, en abierta gama para todos los gustos y preferencias.
Hoy, 15 mayo, el poder radica, situación excepcional, en cada ciudadano, en cada ciudadana, en cada persona en capacidad de votar.
Hoy, el poder del poder, desciende de las estructuras del poder, para poner en cada persona, la posibilidad de elegir. De cambiar o perpetuar. Cada quien, se proclama como la mejor oferta.
Hoy, 15 de mayo, se levantan los entusiasmos y las esperanzas.
Hoy, 15 de mayo, se termina la campaña, que ciertamente nos tuvo ahítos y sobresaturados, ocupando cada espacio radial, cada resquicio televisivo, cada valla de publicidad exterior y cada brecha radial.
Hoy, 15 de mayo, no es un día para buscar “lo mío”, tanto en la oposición como en el poder.
Hoy, 15 de mayo, en buena parte de las propuestas se formulan a realidad las ambiciones de quienes están arriba y de quienes aspiran llegar a ese punto con el ánimo de ser poder.
Las trayectorias de quienes compiten por el voto, son conocidas.
Los hechos de cada quien deben permitir un juicio claro, sincero y basado en criterios de valor, para que cada quien emita su sufragio.
Hoy, 15 de mayo, hay mucha gente buena en las boletas propuestas. Corresponde a cada quien determinar a quién favorece.
Hoy, 15 de mayo, que cada quien se haga responsable. Lo que se define con esos votos, nos beneficia o perjudica como comunidad.
El ideal de la democracia tiene hoy, 15 de mayo, su gran cita.
No dejar de ir a votar. Por ninguna razón, incluso si llueve, para lo cual paraguas y vehículos siguen disponibles.
Hoy, 15 de mayo, la cita es la más importante a que nos llama el poder que tenemos.