Halle Bailey como Ariel y Jonah Hauer-King como el Príncipe Eric en la película de acción real de Disney LA SIRENITA. Foto de Giles Keyte. © 2023 Disney Enterprises, Inc. Todos los derechos reservados.
Cuéntenos cómo fue que obtuvo el papel para la película.
Recibí un correo electrónico de mi agente en el que me decía que estaban haciendo una nueva versión de LA SIRENITA y me preguntaba si quería audicionar. Esta es una de las películas que significó mucho para mí cuando era niño, y sabía que iba a ser una superproducción, así que decidí mandar un video de mí mismo y ver qué pasaba. A partir de allí, fue un proceso de seis meses de audiciones. Me había quedado totalmente sin voz el día anterior a mi primera reunión con Rob Marshall, lo que me pareció muy apropiado para la película (ya que se relaciona con Ariel), pero él estuvo encantador y muy amable, se apiadó de mí y me hizo ir a cantar varias semanas después, y lo hice, y luego tuvimos una audición final con vestuario y maquillaje en el extraordinario set que habían construido. Allí fue cuando conocí a Halle y trabajé con ella.
Fue una experiencia tan extraordinaria que pensé, bueno, si no me dan el papel, igual valió la pena. Un par de días después, recibí un llamado telefónico de un número desconocido. Atendí y escuché una voz que decía: “Hola, habla Rob Marshall. Querría hablar con el príncipe Eric”. Y yo dije: “¿Cómo? ¿Qué?”. Y él me dice: “Es tuyo, el papel es tuyo. Ve a celebrarlo. Te queremos. Nos vemos pronto”. Corté y 15 minutos después comencé a cuestionarme genuinamente si eso había pasado de verdad, así que le mandé un mensaje de texto al número diciendo: “¿Usted me llamó y me ofreció el papel o me lo imaginé?”. Y Ron me contesta: “Sí, zoquete, fue real”. Probablemente estaba pensando: “¿Quién es este tonto al que acabamos de contratar?”.
- ¿Cuál fue su reacción inicial a que se hiciera una adaptación de acción real de una película animada tan querida?
Con una nueva versión de una película como esta, creo que el éxito depende primeramente de honrar lo que fue tan extraordinario en la película original. La música y el encanto de esa película en especial fueron muy apreciados por el público. Pero, además del deseo de ser auténticos y fieles a eso, hay que darle vida nueva, y Rob Marshall quería hacer exactamente eso. Desde el primer día, dijo que quería hacer una película de gran escala y magnitud, una película épica, y que temáticamente pudiese transcurrir en el mundo actual.
Podemos aprender mucho de esta película, y creo que él realmente impulsó a David Magee, el guionista, y al productor John DeLuca a hacer eso. Querían tratar de recrear todo lo que amamos la primera vez pero, al mismo tiempo, hacer una versión realmente nueva. La música es una parte muy importante de la película, y una de las razones por las cuales fue tan especial, además del humor y de los personajes, pero es una película para la familia, para todo público. En cambio, nuestra historia toca temas que son un poco más maduros, es como una versión más adulta de la historia.
- Cuéntenos de qué trata la historia.
Creo que, esencialmente, LA SIRENITA es sobre dos mundos, dos reinos que viven uno al lado del otro, que están en conflicto y tienen miedo el uno del otro, y que están aislados entre sí. Y, finalmente, es sobre una muchacha, una sirena, que no tiene miedo y es muy curiosa, y se enamora de una persona del otro mundo y finamente logra unir esos dos mundos, para que vivan en armonía y al mismo tiempo celebren sus diferencias.
- ¿Cómo describiría al príncipe Eric y su relación con Ariel?
Eric es una persona buena y compasiva, y al mismo tiempo tiene un gran sentido de la aventura y tiene un espíritu libre. Pero cuando lo vemos por primera vez, está bastante perdido. No sabe quién es y hay algo de inquietud y de preocupación en su interior. Creo que es por eso que le atrae tanto el mar. Le atrae lo desconocido y lo que hay en el mundo, más allá de lo que tiene alrededor. No le gustan los altos muros del castillo y lo que representan, y está aprendiendo sobre sí mismo y convirtiéndose en una versión de sí mismo más evolucionada, en parte por haber conocido a Ariel.
Ariel es la primera persona que conoce con quien puede sentirse plenamente identificado y con quien tiene un espíritu afín. Se siente él mismo por primera vez. Se siente equilibrado y satisfecho, y la comprende porque ellos tienen mucho para ofrecerse mutuamente. Los dos son curiosos y quieren aprender el uno del otro, ese es un aspecto muy hermoso de la relación. Ariel quiere escuchar a Eric hablar de todas las cosas raras que vio en sus viajes por el mundo y mirar todos los mapas. Los dos sienten con el otro una sensación de pertenencia que los tranquiliza. Creo que esa es una parte muy importante de la historia de él y de su arco narrativo: entender quién es él realmente y en quién se quiere convertir. La química entre ellos parece estar encendida por la aventura, pero también se divierten mucho juntos y se hacen reír; se sienten muy cómodos el uno con el otro.
- ¿Qué nos puede decir del elenco coral?
Bueno, Ariel es un papel icónico, y si yo fuera el director, estaría nervioso porque hay muchas cosas que tienen que estar bien para hacer este papel. Hay que tener una actriz increíble, una cantante increíble y que tenga un espíritu increíble. Encontraron todo eso en Halle Bailey, que es simplemente extraordinaria. Trabajar con ella fue una de las partes más increíbles y memorables de este trabajo porque es muy talentosa y es una cantante extraordinaria, y tiene todo el peso de esta película en sus espaldas. Y lo llevó con gran elegancia y sin ningún esfuerzo. Fue una amiga increíble para mí, tanto en pantalla como fuera de ella, y la gente va a quedar muy impactada con su extraordinaria actuación.
Melissa McCarthy como Úrsula fue una elección perfecta. Melissa tiene un gran carisma y mucho humor, uno se siente atraído por ella. Una gran parte del mundo de Úrsula es ser desopilante sin proponérselo, algo que Melissa hace con mucha facilidad. Y yo no tenía idea de la extraordinaria cantante que es, es impresionante.
Javier Bardem es uno de mis actores preferidos, así que tener la oportunidad de conocerlo, y encima de trabajar con él, fue increíble; soy un gran fan de él. Le da mucho peso al personaje. Es muy carismático y apasionado, algo que tiene mucho que ver con lo que es el rey Tritón. Hay mucha emoción y poder en él, y hay algo que tiene Javier que es que todo lo que dice parece importante, y Tritón tiene esa misma cualidad.
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La reina Selina es la madre adoptiva de Eric y la interpreta Noma Dumezweni, que es brillante e ideal para el papel. La reina es muy elegante y majestuosa, pero también bastante severa. Ella quiere algo muy diferente para Eric, de modo que la relación tiene un gran desarrollo en el transcurso de la película. Muchas veces están en desacuerdo pero ella lo adora y quiere lo mejor para él.
Art Malik interpreta a Grimsby, que es el primer ministro de la reina. Es su mano derecha y, al igual que la reina, quiere lo mejor para Eric y está tratando de cuidarlo. Se convirtió en una especie de figura paterna para Eric, y creo que está orgulloso de él, pero también le preocupa que sea un espíritu tan libre y piensa que hace falta controlarlo un poco. Art es un tipo genial y le aporta mucho de sí mismo a Grimsby porque él también es muy cálido y divertido. Es el tipo más positivo, de mejor humor y más agradable que hay. Es un placer trabajar con él.
- Cuéntenos sobre la música de la película y qué tipo de preparación tuvieron que hacer.
Yo me crie hacienda teatro, así que estoy acostumbrado a ensayar, pero nunca tuve tres meses de ensayo, y fue genial. Lo que fue realmente maravilloso fue que los actores pudieron entender realmente hacia dónde iba la actuación, hacia dónde iban los personajes, porque cuando un pone el pie en el set, están pasando muchas cosas. Hay campanas y silbatos, y puede parecer un circo, pero Rob Marshall nos dio la oportunidad de encontrar realmente a nuestros personajes y de encontrar primero la interpretación, de modo que cuando entramos al set sabíamos quiénes éramos y a dónde nos dirigíamos.
Fue extraordinario. Hicimos la grabación de las canciones antes, pero Rob quería que tratáramos de plasmar algo de eso en el set, de modo que fue una combinación de escuchar y cantar en vivo, y también un poco hacer mímica y playback. Fue una educación increíble en cuanto a cómo funciona todo eso, porque nunca había hecho algo así. Lo que fue genial es que nos dieron un audífono para poder escuchar la música de la banda sonora, lo que ayudó mucho a preparar la escena. Fue genial cuando filmábamos las escenas de amor y escuchábamos una hermosa música romántica. Te coloca en la situación, hace que sea mucho más fácil estar presente en la escena. Tuve varios momentos durante la producción de la película en los que tuve que pellizcarme para convencerme de que era real.
Trabajar con Alan Menken fue un sueño. Yo me crie con estas películas. Realmente, él fue la música de mi niñez. Fue increíble. Yo llegué el primer día de ensayo pensando que me iban a mostrar lo que tenía que hacer, pero no, me llevaron directamente a ensayar con Alan. Y me dice: “Yo quería saludarte. Tal vez podrías cantar la canción, si es que quieres”. Así que me tiré a la piscina e inmediatamente estaba cantando una de las canciones para Alan, su propia música. Fue una locura, algo increíble, y él fue tan encantador y amable, y muy generoso con todo. Y luego, dos meses después, pasó lo mismo con Lin-Manuel Miranda. Soy un gran fan de él también, así que este trabajo me dio la oportunidad de conocer a varios de mis ídolos y fingir que no estaba deslumbrado, obnubilado, aunque en mi interior estaba como loco. Esta película fue un enorme proceso de aprendizaje, adquirí mucha experiencia.
Las pregrabaciones se hicieron en AIR Studio, en el norte de Londres, cerca de donde vivo. Y siempre supe que estaba ese estudio allí, y es hermoso. Es una antigua iglesia convertida y es impresionante, tanto visual como acústicamente. Grabamos la orquesta y las voces por separado. Primero se grabó la orquesta. Había 80 o 90 de los mejores músicos del mundo. Y yo pensaba todo el tiempo: “¿Qué estoy haciendo yo aquí? Esto es una locura”. Halle Bailey estaba allí también ese día, y ella es muy profesional y estaba tranquila. Fue genial que ella estuviera porque yo estaba nerviosísimo. Mirando hacia atrás, ahora, ojalá hubiese estado menos nervioso para poder disfrutar más. Luego grabamos las voces en un estudio llamado British Grove. Toda la experiencia, para mí, fue como vivir un sueño.
- ¿Por qué Rob Marshall es el director ideal para esta película?
Ensayamos tres meses con Rob, lo que me dio una idea del nivel de preparación y detalle que él espera para una película como esta. Nunca había trabajado con alguien que tuviera un nivel tan brillante de especificidad, claridad y rigurosidad. Y para una película de esta magnitud, realmente se necesita un capitán, y él lo es. Es un director increíble con una visión extraordinaria, nunca había trabajado con alguien así. Creo que todos estarán de acuerdo en que es un visionario y un genio. Es una persona extraordinaria y un director extraordinario, y nos dejó bien en claro desde el comienzo que nos iba a exigir para que diéramos lo mejor de nosotros. Y le estoy muy agradecido por eso.
Realmente nos guio y nos exigió al límite para que no escatimáramos ningún esfuerzo. Lo respeto muchísimo. No se parece a nadie de las personas con las que trabajé. Es increíble. Todos confían en la visión de Rob, todos confían en su gusto, y yo nunca me sentí más seguro en manos de un director. Te puedes sentir vulnerable y frágil cuando haces una película porque estás sacando tus emociones, pero él siempre está buscando lo mejor que cada uno puede dar. No sé si es porque viene del teatro, pero es muy bueno para hacer que todos en la compañía se sientan que son una parte muy importante del proceso.
- ¿Podría hablar sobre el barco del príncipe Eric?
Era enorme. Era mucho más grande de lo que esperaba, pero hermoso. Fue construido por un equipo de especialistas constructores de barcos que construyen y renuevan grandes barcos de vela tradicionales. Eso hizo un poco más fácil mi trabajo porque cuando entras a un set como ese, te transportas completamente a ese otro mundo. Teníamos motores de auto V8 que hacían el viento y cortinas de lluvia que nos caían encima, así que vivíamos el momento. Todo el barco estaba sobre una enorme plataforma que lo movía de izquierda a derecha, y hacia atrás y hacia adelante.
Lo mejor de todo era que lo controlaban con una palanquita como de videojuego, lo que me pareció genial porque con el nivel de conocimientos y de pericia técnica que se necesita para crear esa enorme plataforma, operarla con una palanquita minúscula me pareció desopilante. Esas escenas se filmaron de noche, y fue el abril más frío y el mayo más lluvioso que se hayan registrado. Adam Kirley, nuestro coordinador de escenas de riesgo, y su equipo, me guiaron durante todo el proceso. Me sentí muy seguro en sus manos y me ayudaron y alentaron mucho para hacer cosas que realmente no creía poder hacer, comenzando por estar parado arriba de un mástil y lanzarme hacia abajo con una soga, a lo Tarzán, alrededor de la flechadura del nido de cuervos y caerme del barco. Fue muy emocionante y como el sueño de todos los niños de estar en un gran barco pirata. Fue todo lo que esperaba y mucho más. Dondequiera que miraras, cada centímetro del barco, cada pieza, estaba hecha al detalle.
- ¿Hubo entrenamiento para los actores antes de que comenzara el rodaje?
Hubo mucho entrenamiento para la película. Hubo entrenamiento de carruajes, de escenas de riesgo, con perros, de remo, de navíos, de buceo y en el gimnasio. Fue parte del proceso de ensayo de tres meses y fue como un mini campo de entrenamiento militar. Trabajábamos con Rob Marshall a la mañana, en los personajes y en la historia, y luego corríamos a aprender cómo usar un tanque de buceo, luego corríamos a aprender cómo hacer nudos. Fue divertidísimo.
- ¿Qué impresión le dio LA SIRENITA cuando era niño? ¿Cómo le parece que responderá el público a una película de acción real?
Junto con POCAHONTAS y LA BELLA Y LA BESTIA, fue una parte importantísima de mi niñez. Creo que se destacó especialmente por los personajes, tan divertidos, y con los que te podías identificar. Lo que Alan Menkem y Howard Ashman hicieron con la música fue algo extraordinario que ayudó a que se convirtiera en una película clásica, atemporal. Es un honor inmenso –y creo que todos los que trabajaron en la película sienten lo mismo– poder hacer una nueva versión de esta película, dándole vida nuevamente. Todos tenemos el privilegio de haber trabajado en ella. Espero que al público le guste, que se divierta. La película los hará reír y los hará llorar, y los emocionará de diversas maneras, pero también transmite mensajes muy poderosos: cómo vivimos los unos con los otros, cómo nos entendemos, cómo tratamos de unir personas y mundos diferentes, al mismo tiempo celebrando nuestras diferencias.
JONAH HAUER-KING
Biografía
JONAH HAUER-KING (Príncipe Eric) fue el joven protagonista de Mis huellas a casa junto con Ashley Judd y actuó en la serie de la BBC El mundo en llamas, con Lesley Manville y Helen Hunt. Tuvo su primer papel principal en un largometraje en The Last Photograph, en 2017.
En 2018, protagonizó, junto con Naomi Watts y Bobby Cannavale, la película de James DeMonaco Once Upon a Time in Staten Island y, con Clive Owen y Tim Roth La canción de los nombres olvidados, de Francois Girard. Entre sus demás créditos, cabe destacar Little Women (2017), de la BBC, con Maya Hawke; Retratos de una guerra, con Danny Huston; Old Boys, con Alex Lawther; y Howards End, que se emitió en Starz en 2017.
También actuó en la puesta en el West End de The Entertainer, que protagonizó junto con Kenneth Branagh.
Hauer-King estudió en la Universidad de Cambridge.