El Nacional
El director de la Carrera Judicial, doctor Pablo Garrido, declaró hoy que no se referirá a las imputaciones que en su contra hace la ex presidenta del Tribunal Colegiado de San Juan de la Maguana, Maria Elena Quevedo Rosario.
La semana pasada, la jueza Quevedo Rosario denunció que el presidente de la Cámara Penal de la Corte de Apelación de San Juan de la Maguana, doctor Manuel Antonio Ramírez Susana, le dijo que por instrucciones del doctor Garrido tenía que condenar al ex banquero Leonel Almonte.
Sin embargo, al ser consultado al respecto, el doctor Garrido declaró que no se referirá al caso, en vista de que es un asunto que está en manos del presidente de la Suprema Corte de Justicia.
Quevedo Rosario, juez que presidió el tribunal colegiado que juzgó al ex banquero Almonte, denunció que recibió presiones, chantajes, manipulaciones y amenazas de su superior inmediato, Ramírez Susana, para que condenara al ex empresario bancario.
Dijo que esa denuncia también la hizo en una reunión encabezada por el presidente de la Suprema Corte de Justicia, doctor Jorge Subero Isa, en presencia de Ramírez Susaña.
A mí no es posible comprarme, ni llenarme los ojos con residencias lujosas, automóviles caros, francachelas y ascensos. Soy una jueza garantista que se debe a la ley y a lo único que aspiro es a cumplir con mi deber, sostuvo la magistrada Quevedo en un documento que distribuyó entre los medios de comunicación.
Declaró que cuando fue designada juez de primera instancia del Distrito Judicial de Elías Piña, el 4 de mayo de 1998, se hizo la promesa de combatir el narcotráfico, el tráfico de influencias y a los superiores fariseos.
Reitero, ni me vendo ni me doblo ni me arrodillo ni me dejo chantajear. Proclamo que soy una magistrado idónea, dijo la jueza Quevedo.
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