El comandante general de la Armada Dominicana, vicealmirante Miguel Enrique Peña Acosta, declaró ayer que aunque han sido contundentes los golpes dados a las bandas de narcotraficantes internacionales, la vía marítima es la parte más vulnerable para el bombardeo de cargamentos de estupefacientes.
El alto jefe militar dijo que también los grupos integrados por dominicanos y extranjeros dedicados al tráfico ilegal de personas a Puerto Rico, han sido golpeados de forma contundente, logrando incluso el desmantelamiento de la mayoría de ellos y sus cabecillas detenidos y sometidos a la justicia.
“No podemos negar que la vía marítima es la parte más neurálgica para el narcotráfico, pero nosotros como Armada Dominicana, contamos con los instrumentos necesarios para combatir ese flagelo que entendemos es responsabilidad de todos los dominicanos”, expresó el vicealmirante Peña Acosta.
Los señalamientos del jefe de la Armada se produjeron durante el acto de premiación y reconocimiento de un grupo de miembros de la institución que participaron de forma directa en decomisos de cargamentos de drogas, descubrimiento de viajes ilegales a Puerto Rico y contrabandos de mercancías, entre otras acciones ilícitas.
El vicealmirante Peña Acosta aseguró que la Armada Dominicana trabaja de mano con la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), logrando en los últimos meses interceptar embarcaciones extranjeras tratando de utilizar a República Dominicana como puente en el trasiego de estupefacientes.
“Nosotros estamos trabajando no 24 siete, sino 25 siete 365, cubriendo día a día con nuestros soldados y embarcaciones, los mil 600 kilómetros de costas y los resultados del combate contra las acciones ilícitas por la vía marítima, están a la vista de todo el mundo”, proclamó el alto jefe militar.
Peña Acosta definió como “extraordinarios” los esfuerzos que dice realiza la Armada Dominicana junto con la DNCD y demás organismos oficiales, para impedir que las aguas territoriales dominicanas sean utilizadas por las bandas internacionales de narcotraficantes para el trasiego de dogas.