Luego de ocho años y cinco meses en funcionamiento el Metro de Santo Domingo presenta deficiencias en ascensores, escaleras y una evidente arrabalización en el entorno de algunas estaciones.
La merma en la calidad de los servicios que ofrece el Metro viene marcada en buena medida por la falta de recursos económicos para cumplir con sus obligaciones cotidianas.
En la estación Mamá Tingó, en Villa Mella, la primera de las paradas de la línea uno, en medio del bullicio su entorno ha sido tomado por decenas de vendedores ambulantes, muchos de ellos haitianos.
La entrada norte de esta estación está maloliente debido a que es utilizada como baño improvisado por los vendedores callejeros.

El ascensor de la estación Juan Pablo Duarte fuera de servicio en el que parece pernoctar este desamparado.
Estos comerciantes informales no disponen de baños y se orinan donde pueden.
En los alrededores de la referida estación se ha desarrollado un mercado de frutas, puestos de comida, jugo, tostadas, víveres, chucherías, tiendas de celulares y otros.
Esta es la más movida y populosa de todas las estaciones del Metro con una afluencia de millares de usuarios todo el día. En la mañana los vagones del Metro salen atestados de personas y hay casos en que muchos pasajeros se quedan para el próximo vagón por falta de espacio.
En estos predios también operan varias rutas de guaguas y motoconcho hacia los distintos sectores de Villa Mella.
Lo propio ocurre en las inmediaciones de la parada Los Taínos, próximo a la avenida Nicolás de Ovando, donde decenas de haitianos y dominicanos han instalado negocios en la vía pública. Aquí también el hedor a orina se percibe a lo lejos. Se observan deambulantes y otras personas con aparente retraso mental que utilizan la cercanía de esta estación para dormir.

Desamparados sociales cuyo dormitorio es uno de los laterales de la estación Pedro Livio Cedeño, en las inmediaciones de Villa Juana y ensanche La Fe.
Mientras que de entrada en la estación Juan Pablo Duarte, en los alrededores del Estadio Olímpico, se observa que una de las escaleras eléctricas no funciona. En esta estación se produce la conexión con la línea 2 del Metro, que va Este-Oeste.
En el caso del entorno de la estación María Montez del kilómetro 9 de la Duarte, donde termina la línea 2, choferes de varias rutas de guaguas y carros, así como comerciantes y vendedores ambulantes han hecho de la zona verde del lugar un baño público.
Entre ramas de matas bambú se observan fundas plásticas con materia fecal y orina. Mientras la pared está manchada de orina.
Desde la zona parten rutas de guaguas que van a la Universidad Autónoma de Santo Domingo, el Zoológico, Los Mina, La avenida Luperón, Kilómetro 12, Los Ríos, Mercado Nuevo y otras.

Un variado mercado improvisado en las proximidades de la estación Los Taínos en la Nicolás de Ovando
Diandino pide ayuda
El director de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (OPRET), ingeniero Diandino Peña, reconoce que hay varias escaleras mecánicas fuera de servicio al igual que algunos ascensores. La Opret es la encargada del manejo del Metro.
Atribuye la situación a la falta de recursos para pagar cerca de 15 millones de pesos a la compañía Otis, encargada de dar mantenimiento a las escaleras mecánicas y a los ascensores.
Explicó que esta deuda ya está conciliada con la citada empresa, pero ahora hace falta la mano amiga del Gobierno para poder seguir dando servicio de primera en el Metro de Santo Domingo.
Informó que esta semana pagarán un 33 por ciento de la deuda con Otis y en menos de 15 días otro tercio del monto.
“El Metro está dando un buen servicio, pero en estos momentos tenemos problemas, necesitamos dinero, tenemos deudas con la compañía Otis que se dedica a dar los mantenimientos a las escaleras mecánicas y a los ascensores para garantizar una adecuada movilidad vertical”, señaló.
Añadió que “es que hemos ido perdiendo nuestra capacidad de respuesta, cuando no pagamos comienzan las dificultades porque entonces Otis no nos da el servicio de mantenimiento”.
Según Peña, para operar adecuadamente el Metro necesitaría que el Gobierno le devuelta los mil 300 a mil 400 millones que le aporta cada año.
Otros casos
En la estación del Centro de los Héroes, en el sector La Feria, actualmente el ascensor no funciona y una de las dos escaleras mecánicas está fuera de servicio desde hace más de una semana. Lo mismo ocurre con el ascensor de la estación Casandra Damirón, en los predios de la Plaza de la Cultura, frente al Teatro Nacional en la Línea uno.
Reporteros de El Nacional también recorrieron la estación Francisco Alberto Caamaño de Deñó, ubicada en la calle Correa y Cidrón, en la Zona Universitaria, y notaron que sus dos escaleras está dañadas.
Tampoco funciona el ascensor de la estación Pedro Francisco Bonó, en la línea dos.
El arrabal
El director de la Opret teme que algunas de las estaciones del Metro se puedan convertir en una Duarte con París cualquiera. Señaló que es responsabilidad de los gobiernos municipales donde opera el Metro mantener los entornos de las estaciones limpios y organizados.
“Nosotros por ejemplo garantizamos el orden y la seguridad a lo interno de las estaciones con el Cuerpo Especializado para la Seguridad del Metro (CESMET), pero fuera es la municipalidad quien tiene que ocuparse de mantener el área limpia y desarrabalizada”, afirmó.
En las cercanías de las estaciones Mamá Tingó en Villa Mella, Los Taínos, Juan Pablo Duarte y María Montez fueron observados varias personas que utilizan el entorno como dormitorio y otros son retrasados mentales. Es responsabilidad de los ayuntamientos correspondientes desarrabalizar esas áreas.
Historia
El Metro de Santo Domingo fue inaugurado por el entonces presidente Leonel Fernández, el 27 de febrero del 2008.
La segunda línea del Metro la inauguró el 1 de abril de 2013 el presidente Danilo Medina.
La línea 1, Norte-Sur, consta de 16 estaciones y una longitud de 14.5 km. Esta línea permite en gran medida descongestionar el Corredor Norte-Sur de Santo Domingo, uno de los de mayor tráfico en la Capital.
La línea 2, Este-Oeste, comprendida entre el Puente Francisco del Rosario Sánchez (Puente de la 17) y el kilómetro 9 de la autopista Duarte con avenida Luperón, consta de 14 estaciones soterradas distribuidas en 13 kilómetros.
Un Apunte
Materia fecal y orina
El entorno de la estación María Montez del kilómetro 9 de la Autopista Duarte , donde operan rutas de guaguas y carros, es un baño público. Entre las ramas de matas de bambú se observan fundas plásticas repletas de heces fecales y la pared está manchada de orina.
El Dato:
Diandino Peña asegura que para operar adecuadamente el Metro necesitaría que el Gobierno le cumpla con los mil 300 a mil 400 millones que