Los niños y adolescentes de Santo Domingo Norte tienen una alta probabilidad de ser víctimas de explotación sexual comercial derivada de los elevados niveles de pobreza, deserción escolar, violencia en el entorno familiar y la demanda de turismo sexual.
Así lo determinó la Asociación de Ayudas a las Familias (ADAF) en un estudio que presentó en la sede del Colegio Dominicano de Periodistas.
En la actividad la entidad también lanzó la campaña “¡Si callamos, nos hacemos cómplices! La explotación sexual comercial infantil es un delito”, la cual persigue prevenir y reducir ese fenómeno.
“En el proyecto están involucrados nueve centros educativos identificados como de alto riesgo (seis públicos y tres privados), la sociedad civil de Los Guarícanos y el Ministerio de Educación”, dijo la coordinadora del proyecto, Adalgisa Batista.
Afirmó que este plan, patrocinado por el Gobierno de Aragón y la Fundación Más Vida de España, permitirá fortalecer las capacidades personales y familiares, reduciendo los riesgos psicosociales y de salud física que conlleva esta situación, restituyendo a las víctimas en sus derechos y garantizando que finalicen su educación.
Detalló que con el apoyo de Educación ADAF brindará capacitación a 70 docentes de nueve centros educativos, con la intención de favorecer la identificación de personas en riesgo y víctimas de la explotación sexual comercial infantil, así como implicar a profesores en la prevención, fomentando su intervención.
Batista también hizo referencia a estudio realizado por la Organización Interncional de Trabajo (OIT/IPEC) en 2006 que determinó que en el país hay tolerancia social en torno a esa actividad delictiva, ya que el 7 por ciento de los entrevistados considera que pagar a una persona menor de edad para tener relaciones sexuales no debe considerarse un delito.