¿Qué Pasa?

“Papi era excepcional y lo amaré por siempre”

“Papi era  excepcional y lo amaré por siempre”

Compañero y amigo inseparable, hombre de fe y lleno de enseñanzas, así era Sergio Cruz, el padre de Manny Cruz, fallecido hace dos años y de quien el cantante expresa “me llena el alma cuando recuerdo su sonrisa y su manera de hacer chistes”.

Dice estar completamente de acuerdo, con la afirmación de que es mejor recordar a los seres queridos, con las anécdotas o recuerdos agradables vividos junto a ellos y nos comparte que lo recuerda además “cuando me enseñaba de historia, de la Biblia, de cómo hacían los aviones, cuando yo viajaba y se metía en google maps para ver dónde estaba y me llamaba contento describiéndome el lugar donde me encontraba”.

“Papi era un hombre excepcional y yo lo amaré y lo recordaré por siempre como el mejor padre que Dios me pudo regalar”, dice el artista reconociendo que aunque hace 2 años que su padre falleció, todavía lo extraña como nunca.

“Yo hablaba con papi por teléfono algunas 10 a 15 veces al día, y el saber que no puedo agarrar mi celular y llamarlo pues me parte el corazón en mil pedazos. Esto te lo escribo con un nudo enorme en la garganta y lágrimas en mis ojos. Pero al ver lo tranquilo que él estaba cuando ya sabíamos que le quedaba pocos días y cómo me decía tan serenamente que iba a estar en un mejor lugar y que ya añoraba estar en la presencia del Señor, pues eso me tranquiliza”.

Para no olvidar

Manny dice que las anécdotas son demasiadas, pero no olvida cuando lo llevaba y buscaba al colegio, o cuando siempre andaba con él y lo acompañaba a todos los lugares, iglesia, supermercado, a la casa de sus amigos, hacía todo con su papá cuando era un niño.

“Y luego cuando grande, me encantaba cuando ponía su música clásica que le gustaba escuchar y me ponía a identificar cada instrumento, cuando me cocinaba pechugas con soda y naranja o sus albóndigas con corn flakes. La verdad es que son muchos los recuerdos de papi en mi vida”.

Sobre los consejos que le han servido para toda su vida, confiesa que lo más importante es que siempre le decía que atesorara la palabra del Señor. “Creo que eso abarca todos los consejos que un padre te pueda dar. Si sigues los mandamientos de Dios, no necesitas más nada”.