En el epicentro de un tornado de reformas institucionales, económicas, políticas y sociales, el Banco Central ofrece la buena nueva de que la economía dominicana registró una expansión de 4.8 % en julio y una variación interanual de 5.0 %, lo que la sitúa como la de mayor crecimiento en la región.

El banco emisor refiere que ese comportamiento tiene lugar en un entorno de estabilidad de precios como resultado de políticas monetarias y fiscales que han permitido sortear factores de riesgo para el desempeño de la economía, cuyo crecimiento se mantiene en consonancia con previsiones de organismos internacionales.

Entre las reformas anunciadas por el Gobierno figura la referida a la fiscalidad, cuyo diseño, discusión, aprobación y aplicación se haría en un contexto de estabilidad macroeconómica, crecimiento de la economía en torno a su potencial y control de inflación por debajo de la meta del Banco Central y de la Junta Monetaria.

En el informe del Banco Central se resalta la resiliencia del aparato productivo nacional ante un contexto mundial, en el cual las tasas de interés en los mercados internacionales permanecen relativamente elevadas y afectadas las expectativas de los agentes económicos por incertidumbre asociada a conflictos en Medio Oriente y Europa del Este.

Al momento de abordar el conjunto de reformas estructurales, Gobierno, Congreso, clase política, empresariado, sector sindical, academia y sociedad civil deberían fijar como meta que ningún interés sectorial o particular afecte negativamente la estabilidad en los indicadores económicos.

El Banco Central destaca las señales positivas que muestra Estados Unidos, principal socio comercial de República Dominicana, en sus principales indicadores macroeconómicos, así como las perspectivas de que la Reserva Federal aplique recorte a la tasa de interés, todo lo cual beneficia a la economía dominicana, sin comprometer la meta de inflación.

Las actividades de bares, hoteles y restaurantes (8.0 %), intermediación financiera (8.0 %) construcción (4.6 %), zonas francas (6.4 %), inmobiliaria (5.9 %) y agropecuaria (4.2 %), figuran entre los sectores de mayor aporte al crecimiento económico durante el periodo enero-julio, que también han sido factores de mayor generación de empleo.