Santo Domingo.- Cinco jugadores dominicanos figuran como los mejores prospectos defensivos de sus respectivas organizaciones de Grandes Ligas, según un análisis de expertos del portal MLB.com.
Se trata de los torpederos Rikelbin de Castro, de los Azulejos de Toronto, Jeremy Peña, de los Astros de Houston, y Armando Cruz, de los Nacionales de Washington, y los jardineros Cristian Paché, de los Bravos de Atlanta, y Johan Rojas, de los Filis de Filadelfia.
El reporte señala que aunque el aspecto del bateo es lo que más se destaca cuando se habla de un prospecto, es su desarrollo defensivo lo que más lo acerca a su ingreso a las Grandes Ligas.
De Castro es un prospecto de 19 años firmado por los Azulejos con un pacto de $1.2 millones en julio de 2019 con habilidades “para hacer jugadas especiales con los rodados y un brazo superior al promedio”. Jugó en 33 de 39 juegos en las paradas cortas en el Complejo de Florida la pasada campaña y su ascenso a una temporada completa dependerá de su consistencia.
Peña, es el hijo del ex ligamayorista Gerónimo Peña y se resalta que es el jugador de más alta selección en el sorteo procedente de la Universidad de Maine como tercero en 2018. Se le describe como heredero aparente de Carlos Correa como torpedero de los Astros con una gran cobertura de terreno debido a su rápido primer paso.
El reporte sobre Peña indica que tiene “manos confiables y aumenta su brazo (de fronterizo a plus) al llegarle a las bolas y soltarlas rápidamente”.
Cruz recibió un bono de $3.9 millones en enero de 2020 que es el tercero más alto para un jugador internacional en la historia de los Nacionales y se debió en parte a los reportes de su fuerte defensa. Cruz tiene “manos, manejo de pies e instintos que le permiten hacer tanto las jugadas de rutina como las de alto nivel”. Los comentarios señalan que su bate permanece detrás de su guante en esta etapa temprana de su desarrollo, pero que la defensa le ayudará a ascender probablemente este verano.
Paché ha sido considerado durante años como el mejor prospecto defensivo en el juego. Su velocidad e instintos “son extraordinarios en el bosque central y tiene un brazo que le daría envidia a cualquier jardinero derecho”.
La velocidad de Rojas considerada en un grado 70 funciona en ambos lados de la bola, permitiéndole cubrir gran terreno en el bosque central. El reporte sobre Rojas subraya que “no es un simplemente un velocista sino que sus instintos le permiten a su velocidad elevar su capacidad en el campo junto a un brazo por encima de promedio que es también una ventaja”.