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Ven ayunar 14 horas mejora el sueño y el estado de ánimo

Ven ayunar 14 horas mejora el sueño y el estado de ánimo

MADRID . (larazon.es).Es una de las polémicas de nuestros tiempos, al menos en lo que respecta a nutrición: el ayuno intermitente. Con estudios a favor y análisis científicos en contra, se trata de una opción que cada vez se investiga más para dilucidar si funciona o no. Y el último estudio señala importantes beneficios en relación con el sueño y el estado de ánimo.

De acuerdo con un equipo de científicos del King’s College de Londres, liderado por Sarah Berry, limitar nuestra alimentación a una ventana de diez horas se asocia con mayor energía, mejor estado de ánimo y menores niveles de hambre. Esa es la conclusión del mayor estudio científico de este tipo, al menos en el Reino Unido.

El ayuno intermitente (AI) es la práctica de restringir el consumo de alimentos a un período determinado y según algunos estudios tendría beneficios a la hora de perder peso. Un período de diez horas, como el que propone el equipo de Berry, significa limitar el horario de alimentación diario a diez horas y ayunar durante las 14 horas restantes.

Períodos restrictivos
A pesar de que algunos defensores del AI comúnmente promueven períodos restrictivos para comer de tan solo seis horas, los hallazgos detallados en el resumen muestran que incluso comer dentro de un período menos restrictivo de diez horas sigue teniendo beneficios positivos para la salud, como cambios en el estado de ánimo, la energía y el hambre.

Los resultados se han presentado en la Conferencia Europea de Nutrición (bajo el título Ten hour time-restricted eating (TRE) is associated with improvements in energy, mood, hunger and weight in free-living settings: The ZOE BIG IF Study).

Entre conclusiones
Y entre las conclusiones destaca que quienes fueron consistentes con su ventana de alimentación tuvieron mayores beneficios que aquellos que variaron su ventana de alimentación día a día. “Este es el estudio más grande fuera de una clínica estrictamente controlada que demuestra que el ayuno intermitente puede mejorar la salud en un entorno del mundo real – señala Berry -. Lo realmente emocionante es que los hallazgos muestran que no es necesario ser muy restrictivo para ver resultados positivos.

Mejorar ánimo
Una ventana para comer de diez horas, que es manejable para la mayoría de las personas, mejoró el estado de ánimo, los niveles de energía y la gestión del hambre. Descubrimos por primera vez que aquellos que practicaban una alimentación restringida en el tiempo, pero no eran consistentes día a día, no tenían los mismos efectos positivos para la salud que aquellos que se dedicaban todos los días”.

En total, el estudio incluyó a 37.545 personas que utilizan la app de salud ZOE Health y completaron el período de intervención principal de tres semanas. Se pidió a los participantes que comieran normalmente durante la primera semana y luego durante un período de alimentación de diez horas durante dos semanas.

Completar estudio
Más de 36.000 participantes completaron el estudio y 27.371 (el 78% mujeres con una edad media de 60 años) se mostraron muy comprometidos con el mismo. Los participantes con un período de alimentación más largo antes de la intervención vieron un beneficio aún mayor para su salud.
“Este estudio se suma al creciente conjunto de evidencia que muestra la importancia de cómo se come – concluye la coautora Kate Bermingham -.
En la salud
El impacto de los alimentos en la salud no es solo lo que se come, sino el momento en el que se elige consumir las comidas, y la ventana de alimentación es un comportamiento dietético importante que puede ser beneficioso para la salud. Los hallazgos muestran que no es necesario comer todo el tiempo. Muchas personas se sentirán saciadas e incluso perderán peso si restringen su comida a un período de diez horas”.

Ahora sí, vamos con la letra pequeña del estudio. Primero: se trata de un estudio observacional, es decir, que es puramente estadístico y los responsables solo analizan las variables propuestas. Nada más. Tampoco ha sido revisado por pares.

Completivo
A eso hay que sumarle que si de los más de 27.000 voluntarios, 22.000 eran mujeres de más de 60 años, el grupo analizado resulta muy específico como para extender estas conclusiones a diferentes edades.
Finalmente, también hay que señalar que tanto Berry como Bermingham y el resto de los autores son los asesores científicos de la aplicación ZOE Health lo que podría constituir un conflicto de interés.

¿Qué es una dieta?
Una dieta es el conjunto de las sustancias alimenticias que componen el comportamiento nutricional de los seres vivos. El concepto proviene del griego díaita, que significa «modo de vida». La dieta, por lo tanto, resulta un hábito y constituye una forma de vivir.En ocasiones, el término suele ser utilizado para referirse a los regímenes especiales para bajar de peso o para combatir ciertas enfermedades, aunque estos casos representan modificaciones de la dieta y no la dieta en sí misma.

De acuerdo a la dieta que siguen, los seres vivos pueden ser calificados de diversa forma: carnívoros (comen carne), detritívoros (se alimentan de sustancias orgánicas muertas), herbívoros (ingieren plantas y frutas), insectívoros (insectos), omnívoros (su sistema puede digerir carnes y vegetales) o caníbales (comen miembros de la misma especie), entre otros. El ser humano es omnívoro por naturaleza, aunque por cuestiones ideológicas o religiosas muchos optan por ser vegetarianos (se abstienen de las carnes y del pescado).

El veganismo, también conocido como vegetarianismo estricto, excluye de la dieta cualquier producto alimenticio de procedencia animal. Mejor dicho, cualquiera cuya elaboración exija la tortura y el asesinato de un animal. Por ello no admite carne de ningún tipo, huevo ni leche, sino únicamente productos vegetales.

Si bien muchos de los detractores de este estilo de vida aseguran que los veganos no se nutren de manera adecuada, el veganismo lleva existiendo desde hace mucho tiempo, y las estadísticas reales indican que la abstinencia de productos animales en la dieta reduce considerablemente los riesgos de varios tipos de cáncer y otras enfermedades de variada gravedad.

La alimentación humana no está determinada sólo por cuestiones biológicas, sino que se encuentra influida por factores sociales, económicos y culturales. Muchas veces la dieta está condicionada por la disponibilidad de alimentos que depende de condiciones climáticas y de la ubicación geográfica de cada región.

Tampoco pueden olvidarse los factores personales que determinan una dieta, como el gusto, la influencia de la publicidad de ciertos productos alimenticios, las preferencias estéticas y otras cuestiones.

Por: JUAN SCALITER

El Nacional

La Voz de Todos