El arca de Noé
“ Noé es el protagonista de la historia del Génesis sobre el diluvio Universal: Dios examinó su creación y se enfureció por los pecados de los hombres, se arrepintió de haberlos creado y decidió destruirlos. Sin embargo , antes de hacerlo se fijó en Noé” . (Pág 39 del libro “ 365 días para ser más culto”).
Este hombre que fue el único, que junto a su familia, quedó vivo sobre la tierra, fue juzgado como un hombre bueno y sin pecado que había que salvar de la destrucción completa de la raza humana.
“Noé, voy a producir un diluvio que durará 40 días y sus noches y para que te salve junto a tu familia, construye un arca grandota y ahí junto a toda tu familia inclúyeme una pareja de cada especie animal” , le ordenó el Señor.
A los 150 días se desmontó Noé en el Monte Arará para iniciar el proceso de reproducción de humanos y animales.
Basado en esta historia que aparece en la Biblia (Génesis), yo me pregunto :
Si de repente amanecemos mañana después de un diluvio de siglos y nos encontramos las siguientes características:
Una sola isla que de repente estaba dividida por el centro hacia el oeste le llamarían Haití y en la parte este Santo Domingo. Una amplia franja de mar infranqueable separaba las nacientes naciones.
Un arca gigante llegó con los primeros pobladores. Del otro lado se hablaba francés desde la infancia y de este lado español.
Nadie sabía de la existencia de la otra nación.
Comenzaron a desarrollarse y hubo abundancia de ambos lados
Un ser superior determinó que el “crecer y multiplicaos” sería el resultado del esfuerzo, del trabajo, de la igualdad y de la justicia.
Con el tiempo muchos de los vecinos desafiando el mar llegaron a la parte este en donde habían gobernado por 22 años y entonces…
Construimos una gran arca y enviamos a todos los Haitianos a su territorio dotados de todo lo necesario para que vivan felices por los siglos de los siglos.
Luchando contra la realidad histórica, sigo soñando y fantaseando:
En un apartado del arca (ya casi destruida por fuerzas del mal), antes de desmontarse en esta isla una mano bienhechora esparció semillas suficiente para la satisfacción alimentaria plena de las embrionarias naciones.
Al correr del tiempo del otro lado había serios desbalances por malas administraciones, entonces: le construimos una universidad; vino un sismo terrible y nos trasladamos a ponerles el pan en la boca y las parturientas encontraron atención humana y gratuita en el este.
La herida que no cicatriza y que alimenta la tea de la discordia, recuerda siempre el salvaje asesinato de humildes vecinos en los años 30 a mano de un tirano muy malo que nos tocó sufrir.
¡El rencor, la exclusión y la explotación han sido el signo de nuestra historia compartida!
Ojalá que uno de los hijos de Noé nos ofrezca a los psiquiatras un antídoto contra el sufrimiento, la envidia y el resentimiento…
Al correr del tiempo el este se fue descomponiendo y el mar se secó y se perdieron los límites…
Pero con toda la humanidad que manda el caso; con las consideraciones que acuerdan los convenios internacionales, por fin……. “ se rompió la taza y cada uno pa’ su casa”…