Los empleadores dominicanos se han declarado contrarios a todo lo que huela a auxilio de cesantía. No pierden ninguna oportunidad para manifestarse contra ese derecho de los trabajadores.
Tan pronto se habla de posible reforma al Código de Trabajo, los empresarios entran en tensión y en prontas diligencias con los diputados y senadores para lograr sus fines. Se podría afirmar que saltan, como tigres de bengala, con su tremendo poder de persuasión.
El auxilio de cesantía es un dinerito que deben pagar a sus trabajadores cuando los despiden, sin que hayan cometido ninguna de las faltas contenidas en el artículo 86 de la ley 16-92, del 1992, mejor conocida como Código de Trabajo. O cuando el trabajador dimite justificadamente, esto es, por faltas cometidas por el empleador, conforme al artículo 97 del mismo Código.
Por tanto, el pago del auxilio de cesantía no es siempre que se le pone término al contrato de trabajo. Si el trabajador incumple con una de sus obligaciones contenidas en el referido texto legal, y el empleador decide sancionarlo con el despido, este resulta justificado y no tiene que pagarle ese derecho, sin importar los años que tenga laborando en la empresa.
De igual manera, si el trabajador dimite y no puede probar que su empleador violó el mencionado artículo de la legislación laboral, tampoco recibirá ningún pago por el concepto que nos ocupa. Tendrá que conformarse con los derechos adquiridos.
Estos son los salarios que correspondan a la proporción de navidad, de las vacaciones y de la participación en los beneficios de la empresa.
Recordemos que el pago de los salarios de navidad y de las vacaciones, dependerán del tiempo trabajado durante el año en que concluye la relación laboral. Y la participación en los beneficios de la empresa, también se corresponderá con una parte casi insignificante de las ganancias que haya tenido la empresa en ese año.
Y el empleador tiene ante el período fiscal de que se trate. Pero si no registra ganancias en su declaración jurada ante la Dirección General de Impuestos Internos, no pagará nada a sus trabajadores, por esa causa.
Las empresas que están acogidas al régimen de zonas francas están libres del pago de la participación en los beneficios de la empresa. Sus trabajadores se quedan oliendo donde guisan. Y guisan mucho.
El esfuerzo que hacen los empleadores para eliminar el auxilio de la cesantía es digno de una mejor causa. Quieren perjudicar a los que solo tienen su tiempo y su energía para conseguir su comida.
Sabemos que los salarios mínimos actuales no alcanzan ni para cubrir el costo de la canasta familiar. Eliminar la cesantía es una injusticia social.