Santo Domingo.-La Cámara Penal de la Corte de Apelación de San Pedro de Macorís deberá decidir en tres días si acoge o rechaza la inhibición del juez presidente de la Cámara Penal de La Romana que rehusó conocer un recurso de amparo en contra de la fiscalía de esa jurisdicción.
El magistrado Carlos Peña Martínez se inhibió de conocer el recurso de amparo que interpuso el recluso Juan Tomás Richiez Ditrén, por su traslado irregular, sin una orden motivada y escrita de un funcionario judicial competente.
El reo lleva nueve meses preso, sin que se le conozca medida de coerción y busca que lo retornen al recinto carcelario donde guardaba prisión.
“No le permiten ponerse ropa ni coger sol, lo mantienen aislado, encerrado en una solitaria”, dijo su abogado, situación que creía se había superado en el país.
El abogado Salvador Catrain definió la actitud del juez como un acto de cobardía que se desprende de las amenazas por parte de la fiscal Reina Yaniris Rodríguez Cedeño.
“La fiscal de La Romana, tiene los jueces penales secuestrados, amordazados, amenazados y por eso, el magistrado se inhibió, no tuvo ninguna razón de derecho para inhibirse”.
Precisó que el recurso de amparo “es para proteger los derechos fundamentales de cualquier ciudadano, amparado por la Constitución de la República y el juez se inhibe por la presión que ejerce en él y con todos los jueces de La Romana, la fiscal Rodríguez Cedeño”.
“Richiez Ditrén está prácticamente secuestrado, sin orden de un funcionario judicial competente del recinto carcelario de La Romana y llevado al Centro Correccional Anamuya, sin orden judicial escrita y motivada”, dijo Catrain.
