CARTAS DE LOS LECTORES

Congresistas de lujo

Señor: director:

Hay diputados que echan chispas, por el desliz del presidente de la Cámara de Diputados, quien dispuso entregar al gobierno el dinero del barrilito y el de los juguetes del Día de los Reyes, para que lo use en los hospitales en condiciones deplorables. Los iracundos congresistas se hacen ignorar, que mucho se habla en los mentideros del dinero del erario que usan en menesteres que no les competen y del glamur con que viven en mansiones lujosas, tienen exoneraciones de vehículos carísimos, su comida en el congreso es gourmet, sus bebidas y otras exquisiteces son de marcas y de napa tienen para su clientelismo politiquero cofrecitos, barrilitos y dicen, que hay otro dinero que con sigilo se los distribuyen.

Como esos excesos económicos salen de las costillas de los contribuyentes, algunos entendemos un error gravísimo sus reacciones tan ácidas, ante las críticas que con sobradas razones hacemos quienes parece ser mientras gobierne el PLD nos tocara una vida cada vez más austera y hacer con nuestro pírrico presupuesto solo lo indispensable. Los legisladores saben que su función es hacer las leyes y vigilar que las cumplamos todos, por eso atónitos estamos los que vimos y escuchamos en un medio televisivo la catarsis soez y peor aún trujillista del diputado Francisco Matos. Llenó de excrementos a comunicadores y enganchados, y lo que es peor nos hizo rememorar a Rafael Leónidas Trujillo, un tirano de indeseable accionar y asimismo fue su final, pues lo hoyaron como una longaniza. Como es Historia Patria deberían leerla los soberbios del gobierno con perfil de dictadores, quizás se les airea la memoria y se despojan de ese odioso rasgo.

El diputado, pidió perdón a los comunicadores y enganchados, pero debió incluirnos a los demás que escuchamos sus malcriadezas, pues también nos embarró de heces y además nos inquietó su trujillismo trasnochado. Lógicamente la angustia nos duró menos que una cucaracha en un gallinero, y si su intención era atemorizarnos se le pelo el billete. A los congresistas y otros funcionarios groseros les puede ayudar esta cita en Lucas 6, 45: “El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca”. A los integrantes del “Congreso para el progreso” es pertinente decirles esto: si insisten en no asumir su rol (establecido en la Constitución), en seguir malgastando el dinero de los contribuyentes, y cuando abren la boca nos hacen sentir vergüenza ajena, entonces tengan por seguro, que a riesgo de lo que sea, las criticas seguirán su agitado curso y a DIOS que reparta suerte.

Atentamente,

Lic. Teresa Gómez