SAN JUAN DE LA MAGUANA. Poco más de dos meses después del primer picazo por Simón Lizardo Mézquita, con la presencia del presidente Danilo Medina para la construcción de una moderna funeraria, esos trabajos continúan paralizados por oposición del cabildo local.
Mas que originar “obstrucción, dificultad en el tránsito vehicular,” como alega la alcaldesa Hanói Sanchez Paniagua, muchos sectores sociales y empresariales consideran que detrás de esa oposición se esconde una retaliación política.
Para la construcción de la funeraria que funcionaria en la calle Club de Leones, casi esquina independencia, el Banco de Reservas adquirió unos terrenos, Lizardo Mézquita, administrador de esa entidad, junto al presidente Medina y otros funcionarios, dieron el primer picazo.
Quienes consideran que la prohibición a la construcción de dicha funeraria guarda relación con retaliación política, basan su apreciación en que la alcaldesa Sánchez Paniagua, mimbro del Comité Central del Partido de la Liberación Dominicana, pertenece a la corriente del expresidente Leonel Fernández.
Con la construcción y puesta en operación de esa funeraria, muchas familias se ahorrarían miles de pesos que pagan a los propietarios privados de esas empresas que viven de los muertos.
De las tres funerarias existentes aquí, dos, la Luz Divina y Fortuna, operan en el mismo centro de la ciudad.
