Articulistas

El poder de la barba

El poder de la barba

José Antonio Torres

A lo largo de la historia y en las diferentes culturas, a los hombres con vello facial se les ha atribuido la sabiduría, la potencia sexual o un estatus social alto, pero también la falta de higiene o refinamiento y una disposición excéntrica.

En la antigua Grecia, la barba era símbolo de sabiduría, madurez y virilidad, todavía en América y Europa algunos las usan con aire de intelectualidad. Ese no es mi caso.

 Cabello y barba crecidos también eran signo de virilidad en los primeros tiempos de la antigua Roma, por lo que era el estilo más habitual.

Sin embargo, más adelante se consolidó la tendencia de llevar el pelo corto y la cara afeitada, dicen que fue  Alejandro Magno quien  cambió la tendencia cuando ordenó a sus soldados que fueran afeitados para impedir que sus enemigos les agarrasen las barbas durante los combates.

En algunas religiones los hombres deben llevar la barba completa. También fue incluida en la moda, para las que se han definido varios estilos de barbas que se pueden usar enfocadas en diferentes tipos y formas de rostros.

Hoy en día es habitual cruzarse con todo tipo de barbas: frondosas, de chivo, de dos días… Hay reyes y presidentes con barba, y también artistas o gente corriente. Llevar barba es una opción estética más, y en la época moderna la prevalencia del vello facial va variando con el paso de las décadas.

Paradójicamente, el comienzo de la historia de la barba como elemento estético debe situarse en el momento en que el hombre comienza a afeitarse, hecho que parece remontarse a la Edad de Piedra, hace 2,5 millones de años.

En las civilizaciones mesopotámicas, los hombres solían lucir grandes barbas que se consideraban un signo de estatus y respetabilidad, y las cuidaban con esmero, adornándolas y rizándolas.

Sin embargo, la barba volvió de moda desde hace dos años, de manera compulsiva debido a que con la llegada de la pandemia de coronavirus muchos hombres sintieron temor de poner su cara en manos de peluqueros que pudieran estar contaminados de la covid-19.

No hay dudas de que la pandemia puso de moda la barba, sin que esta tenga nada que ver con sabiduría ni virilidad.

Por: José Antonio Torres (joseatorres1960@hotmail.com)

El Nacional

La Voz de Todos