Leonel, la reeleccion va, truene, llueve o ventee
El discurso pronunciado el pasado lunes por una red de TV por el ex Presidente Leonel Fernández, fue improcedente desde cualquier punto de vista que se analice. En primer lugar fue un ejercicio antidemocrático, porque se opuso formalmente a la decisión adoptada por el Comité Político del P.L.D. único facultado estatutuariamente para decir sobre tales asuntos, en una reunión efectuada en un hotel de Juan Dolio, el pasado abril, la que se pronunció por una reforma constitucional que permitiese la presentación de un mismo candidato para un segundo mandato constitucional consecutivo, lo que fue ratificado por el Senado, en su sesión del pasado jueves, a unanimidad de los legisladores presentes.
En segundo lugar se embarcó en una disertación para tratar de demostrar que la ley que cursa en el Senado es una ley orgánica, que necesita la mayoría calificada de las dos terceras partes de cada cámara para poder discutirse válidamente, cosa que ahora no se hizo pues se consideró una ley adjetiva, que solo necesitaba de una mayoría simple, de un tercio de los legisladores. Opinión que reputados abogados constitucionalistas apoyan plenamente.
Luego el doctor Fernández se olvidó de que como presidente del Partido su principal labor es el cumplimiento estricto de sus estatutos, y por el contrario abogó por un Referéndum, que según el debe contar con la participación no de un 30% que tal instrumento exige ahora, sino de un 60% de la participación de la ciudadanía en el mismo para darle validez, exigencia que no contempla la carta Magna.
El ex Presidente Fernández reconoció que la voz del pueblo es la voz de Dios, que en este reside la voluntad ciudadana, y que actualmente, como el Presidente Danilo Medina cuenta con más del 80% del apoyo de la población, por lo que bien puede intentar reelegirse.
Se refirió el doctor Fernández a que sobre la base de esa popularidad del Presidente de la República se ha levantado la consigna que se lee en letreros en distintas partes del país, de que el pueblo es el que manda, agregando que si se cumplen sus demandas, y si se convoca al Referéndum, él sería el primero en encabezar el movimiento en pro de la reelección del Presidente Medina. En definitiva lo que hizo el ex Primer Mandatario fue colocar una espada de Damocles sobre la unidad del partido fundado por el Profesor Juan Bosch, pues insinuó entre líneas, que si sus exigencias no se cumplen, aprovechará su condición de Presidente del P.L.D. Para provocar un estado de indisciplina, cuyo resultado final sería la división de la organización. Sin embargo el doctor Fernández debe recordar, además del Salmo 23, el aforismo bíblico que enseña que toda casa dividida contra sí misma parecerá. Aunque todo parece indicar que las fuerzas mayoritarias que siguen al Presidente Danilo Medina terminarán por imponerse, para que en el 2016 la reelección sea una espléndida realidad truene, llueve o ventee.
Y hasta el próximo domingo, con más Jerez y más Whisky.