La Feria Internacional de Turismo (Fitur), que se inaugura mañana en Madrid, representa el más importante escenario internacional para la promoción de República Dominicana como destino turístico y de inversión en esa industria que reporta más de diez mil millones de dólares anuales a la economía nacional.
Fitur es un gran ejemplo de lo que se puede lograr cuando gobierno y sector privado aúnan o combinan esfuerzos para impulsar el crecimiento o expansión de sectores estratégicos, como es el caso del sector turismo convertido en eje principal del desarrollo.
A la presencia dominicana en Fitur y en ferias similares de Berlín, y Paris, se debe en gran manera que el número de habitaciones hoteleras en el territorio nacional se acerque a las cien mil, con una ocupación promedio anual superior al 80 por ciento.
La banca múltiple y de inversión financió en 2023 proyectos en el sector por casi tres mil millones de dólares, cifra que sería superada este año, con inversiones en lugares como Miches, Pedernales y Punta Bergantín, a lo que se suman inversiones extranjeras directas y a través de bancos corresponsales.
Planificación, seguridad jurídica, estabilidad monetaria y financiera son los factores esenciales que ayudan a impulsar al turismo que a su vez impacta sobre la agropecuaria, industria, agroindustria, construcción, empleo y transporte aéreo, de cruceros y terrestre.
Otros sectores deberían abrevar de la experiencia que Fitur ha significado para el turismo nacional, como sería la activa presencia de productores agropecuarios dominicanos en ferias como la de Anuga, en Colonia, Alemania, la exhibición agrícola más grande del mundo, o la de Francia, en la cual se promoverían rubros con vocación exportadora.
El destino dominicano recibe más turistas que naciones tan grandes y extensas como Brasil y Argentina, además de ostentar el liderazgo entre naciones del Caribe, logros que se relacionan con la férrea unidad de propósito entre el Estado y el sector privado nacional y extranjero.
Con toda seguridad, hoteleros, bancos, inversionistas y empresarios afines, participantes en la Feria Fitur, retornarán con alforjas repletas de proyectos y oportunidades de negocio, clara señal de que para progresar hay que salir al mundo a pregonar las bondades de esta tierra de primacías.