Opinión

Logística elecciones

Logística elecciones

El «rosario» de errores de la Junta Central Electoral para organizar las elecciones, mantuvo a la población y a los candidatos de múltiples demarcaciones en la incertidumbre y el caos. Por suerte para la Junta y por desgracia para otros, el margen en los resultados entre los candidatos a las Presidenciales era amplio, sino aquí se estuviera peleando.

Los dominicanos demostraron una vez más su vocación cívica al acudir a las urnas de manera civilizada, pero nueva vez la exactitud que atribuimos a las matemáticas, volvió a fallar y se pone en duda si dos más dos es igual a cuatro. Alexander Lukashenko, el último dictador que queda en Europa, al reelegirse en Ucrania por quinta vez en 2015, dijo que las elecciones no se ganan con los votos sino con los que los cuentan.

El Presidente de la Junta, tiene respaldo entre sectores ultranacionalistas pero también animadversión, entre quienes los vemos como una persona arrogante, autoritaria que genera conflictos innecesarios no solo a la oposición sino también a las propias autoridades. Son hechos reprochables, el despojo de los documentos a los dominicanos de ascendencia haitiana, el desconocimiento a la aplicación de la ley 169-14, así como sus polémicas publicas con representantes de gobiernos y organismos internacionales.

Muy a pesar de los cuantiosos recursos destinados a la organización de los comicios, la logística dejo mucho que desear al no poder regular la propaganda ni propiciar un ambiente equitativo para todos los candidatos. Los llamados a votar fueron insuficientes y poco explícitos sino como explicar los altas porcentajes de abstención y de votos nulos.

Introducir un sistema de escaneo sin ninguna evaluación previa, resultó en un fracaso, que se pudo subsanar, gracias a los observadores internacionales que intervinieron para respaldar la demanda de los partidos de un conteo manual. El anuncio de un boicot a las elecciones por parte de unos 3,000 técnicos generó intranquilidad y condicionó la intención del voto.

Aprobar la ley de partidos y reestructurar la dirección de la Junta son partes de las medidas a tomar para lograr un gobierno de unidad.

El Nacional

Es la voz de los que no tienen voz y representa los intereses de aquellos que aportan y trabajan por edificar una gran nación