Michael Roth y Jair Jurrjens el pasado martes hicieron todo lo que estuvo a su alcance para poner sus representados delante en la apertura de la serie final del torneo de béisbol totoño-invernal 2017-18.
El zurdo de las Águilas navegó durante seis entrada en las que permitió cinco hits y una carrera. Tres de los incogibles fueron consecutivos después de dos outs en el primer episodio cuando los azules pisaron el plato para su única vuelta del encuentro que perdieron 1-8.

El curazoleño de los Tigres dejó el partido en ventaja 1-0 cuando necesitó de rescate después de lanzar 5.1 entradas en blanco en las que permitió cuatro hits y concedió tres pasaportes gratis.

Casi una semana después, los dos monticulistas regresarán a la colina central del Estadio Quisqueya Juan Marichal con sus equipos disputándose el derecho de representar al país en la Serie del Caribe.

El juego de esta ocasión tiene más presión para estos protagonistas, pues el espacio de error se ha achicado, especialmente para el lanzador de los azules con su club detrás 1-2en la serie pactada al mejor en siete desafíos.

Roth tendrá la ansiedad de realizar una labor que mantenga a su equipo en juego para dar el chance de colocarse a un triunfo de una corona que no ha regresado a sus manos desde la contienda del 2007-08 a pesar de tres visitas a la serie final durante un período de nueve campañas.

Las Águilas han dominado al Licey 12-7 en los 19 enfrentamientos que han tenido desde el 13 de octubre del año pasado cuando se corrieron las cortinas que dejaron abierta la justa actual.

Con un gran desempeño como local y pobre en las visitas, las Águilas tendrán el chance de poner en jaque a los Tigres estar tarde y darle el mate en ladoble cartelera que está programada para mañana en el Estadio Cibao, conocido como el Valle de la Muerte por lo difícil que se le pone a los contrarios realizar el out 27 en esa instalación.

Un triunfo de los felinos empataría la serie y estos irían a Santiago a buscar división de honores para dirimir el título el próximo miércoles jugando ante su público.

UN APUNTE

¿Otra doble cartelera?

En la justa de 1983-84, Águilas Cibaeñas y Tigres de Licey tuvieron que jugar una doble cartelera en el Estadio Quisqueya en la última fecha del torneo.En esa ocasión el jeugo decisivo correspondía al Estadio Cibao.