Lo ocurrido el pasado fin de semana en distintos escenarios dominicanos es una bofetada a quienes aseguran se viven tiempos malos para el espectáculo.

Tres conciertos el mismo día sábado, todos abarrotados de público.

En la sala Carlos Piantini del Teatro Nacional Eduardo Brito, Danny Rivera presentó un concierto sinfónico, bajo la dirección del maestro Amaury Sánchez.

Horas más tarde se presentaban en el teatro La Fiesta del hotel Jaragua los salseros Charlie Aponte, Yiyo Sarante y Alex Matos, en el concierto “Salsa sobre el Jaragua”, en una producción de Amable Valenzuela.

El mismo día la salsa se paseaba en otro escenario: el salón de eventos de Sambil, con el primer festival de salsa “Encuentro Salsero RD”, con las actuaciones de Ray de la Paz, Willy García, Sexappeal, Ruth La Cantante, Giro, David Kada y Eddy Bonilla, en una producción del joven empresario Richard Richardson.

Tres eventos en el centro de la capital dominicana, con entradas que superaban los 4 mil pesos y alcanzaban cifras astronómicas como 145 mil pesos por una mesa.

Por lo visto, este sábado se vivió una repetición de lo que ha venido ocurriendo desde el levantamiento de las restricciones por la pandemia de la covid-19, en escenarios de Santo Domingo, Punta Cana, La Romana, Samaná, Santiago y Puerto Plata.

La gente está buscando maneras de pasar momentos agradables y va tras esos escapes que ofrece la música.

El entretenimiento es un mundo que gira permanentemente y en el que confluyen ritmos para todos los gustos.

En seis meses son muchos los conciertos y espectáculos presentados en los más importantes escenarios del país y son más los que faltan por desarrollarse durante la segunda mitad del año.

Don Miguelo, Wissin & Yandel, El Alfa, Daddy Yankee, Bad Bunny, Rosalía, Diego El Cigala, Sergio Vargas, Farruko y eventos como el Latin Music Tours, ADN Bachata Festival, y otros, integran la apretada agenda de conciertos y espectácumos pendientes de realizar.