Que Juan Luis es profeta en su tierra, eso no se discute. Su canto, al más alto nivel es un canto con sentido social, que sabe a pueblo, un pueblo que la noche del pasado sábado se rindió a los pies de quien es considerado el más grande cantautor dominicano de todos los tiempos.
Solo faltó la lluvia, esa que como bendición lo acompañó en los últimos conciertos presentados en su República Dominicana. Esta vez, llovió, sí, pero café, gozo, aplausos, baile y el coro permanente de un público que disfrutó de principio a fin la última entrega de su exitosa gira “Entre mar y palmeras”.
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A las 9:37 de la noche comenzó la descarga de canciones con el éxito Rosalía, con el que Juan Luis, impecablemente vestido, salió al majestuoso escenario tropical adornado con tres pantallas gigantes, dos palmeras a ambos lados, líneas gráficas y luces de la más alta tecnología.
“Buenas noches Santo Domingo, nada más hermoso que tocar en nuestro país. Espero que disfruten de este ‘Entre el mar y palmeras’. Qué Dios bendiga a nuestra República Dominicana”, fueron sus primeras palabras ante las cerca de 50 mil almas que se dieron cita en el Estadio Olímpico Félix Sánchez de la capital dominicana.
La celebración de los 40 años de carrera del líder de la agrupación 4-40 continuó con La travesía, La llave de mi corazón, Vale la pena, Como yo, e introdujo el tema Dj Bachata, de su más reciente álbum “Radio güira”, y lo dedicó a su esposa Nora Vega.
Los invitados sorpresas comenzaron a desfilar cuando Juan Luis anunció la presencia del cantautor colombiano Fonseca, con quien interpretó Si tú me quieres, bachata ganadora de Grammy Latino en 2023 como “Mejor canción tropical”.
Y llegó el tiempo de la salsa al estilo “guerra”, con un medley de éxitos y El Niágara en bicicleta, canciones con las que dio paso a sus próximos invitados.
“Quiero cantar esta canción con cuatro cantautores jóvenes que aprecio y admiro mucho, reconocer en ellos a la nueva generación de compositores dominicanos, es algo que me llena de alegría. Con ustedes Pavel Núñez, Techy Fatule, Melymel y Alex Ferreiras”, cuarteto al que acompañó en Amor de conuco.
De nuevo solo en el escenario dedicó Para ti, “a mi Señor Jesús”, dijo antes de interpretar esta canción homónima de su primer álbum cristiano publicado en 2004.
Tras un medley de bachatas, el tiempo retrocedió a 1987 (Mientras más lo pienso… tú/tercer álbum de 4-40) y las pantallas empezaron a mostrar fotos de los originales: Juan Luis, Maridalia Hernández, Roger Zayas y Mariela Mercado, los siguientes invitados y, entonces, la euforia del público hizo estremecer el llamado “hoyo negro” del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte.
El público exultante les arrebató Tú, uno de los himnos de la exquisita discografía de Guerra. Al finalizar la canción éste no dio tiempo al tedio cuando al iniciar las primeras notas de Como abeja al panal, anunció la presencia de Adalgisa Pantaleón, quien fue recibida con gritos ensordecedores por la masa de gente que ha hecho de esta icónica canción infaltable en su play list.
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Cuando se pensaba ya no habría más invitados, el swing se hizo presente con los primeros acordes de Visa para un sueño hicieron su entrada Los Hermanos Rosario (Rafa, Tony y Luis), quienes pusieron a bailar a Juan Luis, y a los miles de asistentes al estadio, con La dueña del swing, el gran éxito musical de la agrupación higueyana.
El recorrido continuó con Mambo 23, El costo de la vida, Ojalá que llueva café y con este grito de esperanza llegó el último invitado.
“Pónganme la foto”, solicitó Juan Luis. “En esa foto tenía él como 8 años y hoy es uno de los ídolos más grandes de la música dominicana. Mi querido Vicente García”.
El joven cantautor, ganador de Grammys, interpretó Loma de cayena, un merengue romántico que hizo con Juan Luis Guerra, de quien Vicente ha revelado que ha sido la influencia más precisa de su carrera.
Juan Luis regresó al merengue con El farolito y Las avispas, canciones con las que llegó el falso final, pero el público no estaba dispuesto a dejarlo ir, por lo que el ¡otro, otro, otro! No se hizo esperar, haciendo regresar al artista que se reservó tres de sus grandes éxitos para despedir el tour “Entre mar y palmeras” en su terruño.
Con A pedir su mano, Bachata rosa y La bilirrubina, Juan Luis cerró una gira que inició en marzo de 2022 y se paseó por los más exigentes escenarios de América y Europa donde agotó todas las entradas en cuestión de horas.
Con fuegos artificiales, lluvia de confetis y gigantes pelotas entre el público, Juan Luis Guerra despidió, a las 11:30 de la noche, el que sin temor a equívocos es el más impactante espectáculo de la última década presentado en escenarios dominicanos. ¡Apoteósico!
El rap presente
La rapera dominicana Melymel abrió el espectáculo y fue recibida con una gran ovación, sin duda un pulso para que La Mamá del Rap midiera cómo anda su popularidad en los actuales momentos.
La Mermelada, como también se le conoce, interpretó sus canciones Francés, Me gusta mi feo y Si no te amara. Cerró con el ya emblemático Capea el dough, tema que aprovechó para anunciar un invitado sorpresa: Mozart la Para, quien arrancó gritos y aplausos del público que disfrutó sus improvisaciones. ¡Rap con clase! Gritó una periodista que daba cobertura a “Entre mar y palmeras”.
De inmediato, DJ Korduroy asumió los controles, presentando una ecléctica y variada selección de mixes de canciones de Juan Luis Guerra. Su participación es parte inicial de Entre Mar y Palmeras, recibiendo aplausos y alegría de parte de todos.
Destacar la producción de Saymon Díaz y el equipo de SD Concerts, por el orden y la seguridad en todo el recinto.
