Semana

Aumenta en AL interés reelección

Aumenta en AL interés reelección

En los últimos años se observa una tendencia en Latinoamérica de reformar la Constitución con miras a extender el mandato presidencial, en algunos casos, por reclamo de la población bajo el argumento de que el mandatario ha tenido buen desempeño o que es necesario su reelección para que complete su obra de gobierno.

En otros casos se da por capricho del gobernante que busca extender su período, a pesar de no tener una buena base popular e impone su influencia y recursos para lograr su objetivo.

No es el caso de República Dominicana, donde el actual presidente, Danilo Medina, goza de una amplia aceptación popular (Un 86%, según la encuesta más reciente) y la mayoría ciudadana viene reclamando que acepte su repostulación.

Un planteamiento que ha concitado la atención y el apoyo de diversos sectores, hechos por dirigentes políticos, juristas y otros representes de la sociedad, es que se tome como modelo el sistema de elección norteamericano que permite a un gobernante dos períodos consecutivos y nuca más.

Hay prácticamente consenso en el país de que se adopte el sistema de elección presidencial que rige en los Estados Unidos de Norteamérica y más de 40 países.

Esta fórmula ha caído bien en el espectro político y su aplicación beneficiaría todos los aspirantes presidenciales, aunque algunos la objetan porque no es su momento, y le cae ahora como anillo al dedo al presidente Medina.

La verdad es que la reelección presidencial es un fenómeno electoral en muchas naciones, especialmente en América Latina, sobre todo en los casos de presidentes de amplia popularidad.

La reelección es un mecanismo viable de que dispone el electoral para premiar o castigar la gestión de un mandatario, lo que es positivo, y hasta saludable para la democracia y la estabilidad social y política de una nación.

En el caso del presidente Medina son ostensibles las circunstancias que favorecen su reelección, basadas en su buen desempeño, que reconocen hasta los más enconados opositores a su partido.

Las razones

Se recuerda que el 9 de octubre de 2006 el Gobierno del presidente Leonel Fernández convocó a una gran consulta popular para conocer la opinión ciudadana sobre la reforma constitucional y sus diversos aspectos, incluyendo la reelección.

Sobre la reelección los resultados claros. En la mayoría de los 154 municipios existentes en el momento, las personas deseaban que todo se quedara como estaba: Dos mandatos y después nunca más. Concretamente, el 48% de los ciudadanos defendió la opción conocida como modelo de elección norteamericano.

En ese momento, sólo un 13% eligió que fuera consecutiva, dejando pasar un período y el 11% quería que existiera la reelección de manera indefinida

Las cosas han cambiado. Hoy, el reclamo del retorno a la fórmula de dos períodos consecutivos y nunca más ha duplicado su presencia en la sociedad, pues el 80% de los dominicanos estaría a favor de la reforma constitucional para esos fines.

La Constitución de 2010 recogió prácticamente todas las solicitudes fruto de esa consulta, teniendo en cuenta el sentir de los ciudadanos en la mayoría de sus modificaciones. Amplió derechos y modernizo el marco normativo del país.

Sólo en un punto clave del nuevo texto constitucional desconoció la voluntad popular: la reelección.

De manera, opinan algunos analistas, la situación que hoy se debate en la sociedad dominicana frente a un Presidente que goza de muy buena valoración pública, “es volver a lo que fue el sentir popular”.

Por tanto, algunos políticos consultados consideran que no es procedente tratar de condicionar una reforma constitucional en este punto a que se haga una consulta que ya fue expresada en el año 2006.

Y a juzgar por un dirigente peledeísta, que pidió reserva de su nombre, “hoy el liderazgo político y social tiene la oportunidad de responder con responsabilidad a la ciudadanía y de enmendar esta situación”.

Algunos creen que la actual fórmula de elección presidencial en República Dominicana “es uno de los peores modelos, pues, por un lado impide, en todos los partidos, el surgimiento de nuevos liderazgos, y por el otro, obstaculiza la consecución de muchos de los programas de gobierno que precisan de una continuidad, superior a los cuatro años establecidos, para tener impacto. De todas maneras, la reforma constitución está planteada y será conocida por el Congreso Nacional en los próximos días, en donde se esperan grandes debates entre los que la favorecen y los que se oponen.

En el caso de los legisladores peledeístas, danilistas y leonelistas, se da por contado que se pondrán de acuerdo para dar paso a la reforma de la Carta Magna, como lo aprobó por mayoría el Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en su reunión del domingo 17 de abril.

El Nacional

Es la voz de los que no tienen voz y representa los intereses de aquellos que aportan y trabajan por edificar una gran nación