SANTIAGO. Los celulares, que unos años atrás eran considerados como un medio de uso exclusivo para llamadas telefónicas, se han convertido en un lujo tecnológico que debe contar hasta con el servicio de internet.
Ahora le llaman, celulares inteligentes, sin embargo, hay quienes se están haciendo menos capaces mentalmente por el uso excesivo de este medio que en sus principios fue creado con la finalidad de mantener comunicadas a las personas sin importar distancia.
Ahora, una parte considerable de la población, en especial jóvenes y adolescentes, no sólo lo utilizan para comunicarse con aquellos que se encuentran lejos, también son útiles para chatear con los que están cerca, tanto así que hay quienes se han convertido en fans del chat, conectados las 24 horas del día recibiendo mensajes instantáneos a través de los modelos BlackBerry (BB) y multifuncionales.
Según cifras del Instituto Dominicano de Telecomunicaciones (INDOTEL) en los primeros nueve meses de 2010, se registraron 252 mil 694 nuevas cuentas de teléfonos móviles, renglón dentro del cual los BlackBerry y Iphone van ganando terreno.
Y como si se tratara de una manía o de una moda general, te los encuentras donde quiera, gente cabizbaja, con su mirada fija en la pantalla de un móvil; conectados a la tecnología, pero desconectados de la realidad y es que ellos están pero no están.
En un sondeo realizado por periodistas de este medio en puntos claves donde convergen en su mayoría gente joven y adultos, como son universidades y plazas comerciales, se pudo notar la cantidad de personas que por estar pendientes a la tecnología a penas notaban quienes se desplazaban a su alrededor.
Le hablas, sin embargo, ellos en ningún momento se desconectan de su mundo tecnológico, les preguntas y sin pensar la respuesta hablan, pero en cuanto reciben la alerta de un nuevo mensaje en su bandeja de entrada del chat, continúan alimentando lo que ya se ha convertido en una adicción tecnológica.
Pero, al ser abordados con relación a si se ha convertido en una adición o no, el uso de los celulares para conectarse a internet o más específico aún, para chatear, son ellos los presuntos adictos los primeros en afirmar que no se trata de una adición, es sólo que debemos estar acorde con los nuevos tiempos -Quien no se adapta a la tecnología se queda atrás, olvidado-, afirmó Susana Núñez, momentos en que fue sorprendida en las afueras de una plaza comercial de aquí conectada a su celular, de tal manera que por un aproximado de 10 minutos ignoró la presencia de periodistas de este medio que se encontraban próximo al banco donde permanecía junto a su compañero, el BB.
Susana también dijo que resulta más satisfactorio hablar con sus amigos desde su celular, en cualquier lugar que se encuentre sin tener que estar pegada a la pantalla de un monitor.
Lo cierto es que la tecnología, en especial los celulares con internet, ha atrapado a una parte de la población que se han vuelto adictos al chateo por el móvil, sin importar donde se encuentren.
Práctica peligrosa
Otro problema que gira en torno al uso de los celulares con servicios multimedia es que los conductores son sorprendidos chateando a través del teléfono celular mientras se desplazan por la ciudad, a sabiendas de que la Ley 143-01 prohíbe el uso de teléfonos celulares mientras se conduce un vehículo de motor por las vías públicas.

