Existen muchos estudios que respaldan el trabajo con muchos animales, incluyendo los los caballos. Experta resalta el beneficio que aporta a la salud
Las terapias con animales han experimentado un notable aumento en los últimos años, debido a los beneficios que aportan para la salud del individuo, tanto física como mental, el interactuar con ellos, ayudando a los pacientes a una mayor aceptación, mejorando la ansiedad y la depresión. Los animales más utilizados con estos fines son los gatos, conejos, perros y caballos.
En esta ocasión hablamos de la equinoterapia, que es cualquier tipo de terapia que usa a los caballos como componente principal para trabajar con las personas.
En general es una terapia que tiende a resolver problemas físicos y mentales de las personas, así lo detalla Susana Fassetta, life coach, con más de 30 años de experiencia en el área de la equinoterapia.
“Yo en lo particular no me ocupo de lo físico, aunque lo he hecho en el pasado, pero ahora mismo no es mi principal focus. Mi objetivo actualmente es utilizar los caballos para resolver los problemas mentales, pero más de serenidad y problemas espirituales, lograr que los pacientes entren en contacto con su verdadero yo, su verdadero ser; quiénes son en verdad y qué traen en el mundo, qué ellos hacen aquí en esta vida”, señaló Fassette.
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Explica que este enfoque profundo y divertido, sin la necesidad de tener que montar a los caballos, revela áreas de fortaleza y debilidad, promoviendo el crecimiento personal.
Prácticamente los caballos te demuestran cómo tú te presentas a los demás en tu vida, cómo actúas. Es como mirarse en un espejo, pero siempre con una bella sonrisa.
Los caballos son muy gentiles al interactuar con las personas, entonces uno se da cuenta de cuáles son las áreas donde uno es fuerte, dónde tiene más capacidades y dónde hay que trabajar más, dónde hay una debilidad que puede ser en comunicación en liderazgo, en tomar decisiones, relacionándose con otras personas, dónde hay un autoestima bajo”, explica la especialista.
Dice que la terapia es descrita como cálida y acogedora, permitiendo a las personas enfrentar traumas y resolver problemas relacionales. Revela áreas de fortaleza y debilidad, promoviendo el crecimiento personal, sin la necesidad de montar a los caballos.
Fassetta destaca la rapidez y el placer en este enfoque, señalando cambios significativos en los participantes en un corto período. Susanna, quien es italiana residente en la República Dominicana desde hace muchos años, resalta que no hay requisitos específicos para participar de estas terapias, solo se requiere la voluntad de hacerlo y mantener una mente abierta.
La también consultora de Feng Shui, destaca la seguridad con los caballos como prioridad. Su “curso”, no solo es terapéutico, sino educativo, enseñando herramientas para enfrentar situaciones por sí mismos.
“Lo llamo curso porque más que terapia las personas aprenden muchas cosas de los caballos y a través de eso lo reportan en su vida”, dice.
Busca que los clientes sean, luego de estas terapias, independientes, no dependientes de ella, promoviendo un profundo autoconocimiento y contacto continuo después del curso.
“Siempre me gusta mantener contacto con mis pacientes y a ellos les gusta mantenerse en contacto conmigo, por eso podemos mantener la comunicación en línea, si son de otros países o no pueden llegar aquí, donde estoy con los caballos, pero ellos salen preparados para enfrentar cualquier situación o para resolver problemas que se les presentan en la vida. Eso es lo que realmente uno más se gana de todo ese trabajo. Terminada la experiencia del contacto del trabajo con los caballos se puede repetir”, recalca.
Jamao al Norte
Sussanna Fassette tiene un rancho en Jamao al Norte, donde cuenta con los caballos para ofrecer sus terapias. A través de su sitio web www.ederanch.org y en sus redes sociales se puede observar parte su trabajo.
