Como evidencia la decisión del PRM de explorar un acuerdo con la oposición sobre las candidaturas independientes está claro que los estertores de la sentencia del Tribunal Constitucional todavía no han pasado.

Durante una reunión ordinaria el partido oficialista acordó solicitar a la JCE la convocatoria de una mesa de trabajo con todas las organizaciones para consensuar una propuesta sobre la polémica normativa.

Esa iniciativa, de acuerdo con especialistas en la materia, puede abordarse de manera directa ante las cámaras legislativas.

El Constitucional dejó sin aliento a todos los partidos al acoger un recurso que les quita el monopolio de las candidaturas electorales.

El PLD y Fuerza del Pueblo han rechazado la decisión, pero el PRM, aunque con sus críticas, la ha aceptado como un hecho consumado.

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A los partidos parece no quedarles más alternativa que consensuar una ley que sustente las candidaturas independientes con apego a la Constitución.

En ese sentido el PRM transita el camino más indicado al buscar que bajo el paragua de la JCE todos se pongan de acuerdo en torno a una legislación que respete el derecho de cada ciudadano de elegir y ser elegible.

La sentencia del Constitucional establece los requisitos para que un ciudadano pueda candidatearse al margen de algún partido político.

En principio la fórmula que explora el PRM se presenta como la viable para superar el malestar y preservar el sistema de partidos como uno de los ejes de la lucha por el poder político.